Un millón de palestinos atrapados en el norte de Gaza pese al ultimátum de Israel
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El Estado judío acusa a Hamás de «usar a los civiles como escudo humano»
13 oct 2023 . Actualizado a las 22:12 h.En la madrugada del jueves al viernes, Israel dio 24 horas para evacuar el norte de la Franja de Gaza, en previsión de una inminente ofensiva por tierra. Miles de civiles se lanzaron en masa a la carretera de Saladino, la principal vía de la región, intentando llegar al sur. Pero la kilométrica comitiva se veía interrumpida constantemente por bombardeos israelíes que, según Hamás, mataron a 70 personas. Además, el grupo islamista colocó barricadas para instar a la población a no moverse e «ignorar la guerra psicológica» del Estado judío.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), de hecho, acusaron a las milicias de pretender «usar a los civiles como escudo humano». Y después redujeron el plazo a la mitad: «Les pedimos esta mañana que abandonaran la ciudad de Gaza hacia el sur, por su seguridad. Me gustaría informarles de que las FDI se abstendrán de tocar la ruta marcada en el mapa [la carretera de Saladino] hasta las ocho de la tarde», dijo Avichay Adraee, portavoz militar.
Con más de un millón de palestinos todavía en el enclave, Josep Borrell, Alto Representante de la UE, consideró «totalmente irreal» el ultimátum y la ONU pidió a Israel que anulase la orden «para evitar transformar lo que ya es una tragedia en una situación calamitosa». Paralelamente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) puso el foco en los hospitales. «Hay pacientes muy enfermos, incluidos niños, que dependen completamente de apoyo médico vital para sobrevivir. Pedir al personal sanitario que evacúe va más allá de la crueldad», aseveró el portavoz del organismo, Tarik Jasarevic.
A la petición se unió el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, durante un encuentro con el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken.
Trece rehenes muertos
La confusión y el caos se extendían por la Franja. Muchos civiles no tenían instrucciones ni sabían adónde ir, mientras 1.800 muertos y 6.400 heridos se acumulaban en su lado de la frontera.
El bloqueo continúa, la situación humanitaria se complica, los ataques no se detienen. Durante la noche del jueves, los cazas israelíes siguieron rugiendo y bombardearon 750 objetivos en el pequeño enclave costero.
Y 13 de los rehenes judíos fallecieron por las explosiones, según comunicó Hamás. Después respondió con más fuego. Lanzó medio centenar de cohetes contra el aeropuerto de Ben Gurión —a unos 15 kilómetros de Tel Aviv— y la ciudad de Sderot, en el sur del país. Los ataques contra Sderot llevaron a las autoridades locales a solicitar la evacuación total de la zona para evitar víctimas.
«El Ejército de Israel está realizando incursiones en territorio de la Franja de Gaza para eliminar la amenaza de terroristas en la zona, y localizar a los rehenes», declaró un portavoz militar. Explicó que las FDI atacaron a grupos de milicianos y su infraestructura, y recibieron disparos de misiles antitanque mientras los aviones de combate israelíes bombardeaban el área.
«Los soldados buscaron y reunieron pruebas de apoyo para sus tareas de localización de los al menos 130 rehenes que las milicias palestinas capturaron el pasado sábado», añadió.
Mientras Blinken continuaba con su apretada agenda de reuniones, aterrizaron en Israel la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y la titular del Parlamento Europeo, Roberta Metsola. Ambas trasladaron su solidaridad con el pueblo israelí y se convirtieron en las primeras dirigentes comunitarias en viajar a la zona tras el inicio del conflicto.
«El terror no prevalecerá. Nuestra respuesta importa. Podemos y debemos detener a Hamás», afirmó Metsola.
Un periodista muerto y cuatro heridos por un bombardeo en el sur del Líbano
Un periodista de la agencia Reuters murió y otros cuatro reporteros resultaron heridos en un bombardeo al sur del Líbano, durante una jornada de hostilidades entre el Ejército israelí y las milicias de Hezbolá.
El fallecido fue identificado como el cámara Isam Abdulá. Pertenecía a un equipo de Reuters que emitía señal en directo de la zona.
«Buscamos urgentemente más información, trabajamos con las autoridades de la región y apoyamos a la familia y a los colegas de Issam. Nuestros pensamientos están con ellos en este terrible momento», comunicó la agencia.
El suceso tuvo lugar poco después de que el número dos del grupo chií libanés, Naim Qassem, afirmase que sus miembros están «completamente preparados» para intervenir en la guerra entre Israel y Hamás. «Hezbolá conoce exactamente sus deberes, y sigue los desarrollos momento a momento», dijo.
Desde el pasado domingo, la formación ha lanzado varios misiles desde el sur del Líbano hacia el Estado judío, causando al menos una baja mortal en las filas israelíes, y ha perdido a tres miembros por acciones israelíes.
«Todo el mundo quiere saber qué vamos a hacer», añadió Qassem. Hablaba en una gran concentración al sur de Beirut, en respaldo a Hamás y a la población palestina. «Pero solo participaremos en esta operación de acuerdo con nuestros planes y según nuestros términos, a su debido tiempo», concluyó.