Rajoy fija como prioritarios el AVE al País Vasco y Galicia y relega Asturias

La Voz / Pablo González REDACCIÓN

ASTURIAS

Juan Carlos Hidalgo | EFE

El presidente del Gobierno fijó en un discurso en la asamblea de Instituto de la Empresa Familiar sus preferencias presupuestarias para la alta velocidad

10 may 2017 . Actualizado a las 17:22 h.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se refieró a los compromisos de su Ejecutivo para la puesta en marcha de líneas de alta velocidad de forma preferente, y con dos focos en el norte de España pero ninguno que señale a Asturias. Durarnte su intervención en la clausura de la asamblea anual de socios del Instituto de la Empresa Familiar, se refirió al AVE al País Vasco y a Galicia, por este orden, como sus principales prioridades presupuestarias.

«Tenemos que trabajar para que haya alta velocidad al País Vasco y lo estamos haciendo. También tenemos pendiente Galicia. No vamos a hacer ahora una línea de alta velocidad a Zaragoza, Sevilla o Málaga, por razones obvias [todas estas ciudades están ya conectadas a la red de alta velocidad», dijo durante su discurso en el acto de clausura.

Rajoy, también por razones obvias, nombró el proyecto vasco antes que el gallego porque precisa de los votos del PNV para la aprobación de los Presupuestos, algo que ya se ha logrado gracias a la inyección de dinero en la denominada Y vasca --la línea que une Bilbao, San Sebastián y Vitoria--, y una ventajosa revisión del cupo. El presidente del Gobierno, no obstante, pidió responsabilidad al resto de los partidos para que aprueben las cuentas del Estado, y dijo no entender las razones «de algunos» para no apoyarlas.

Otro retraso en la variante

El Gobierno prevé invertir 571 millones en el ferrocarril gallego y unos 180 en la red vasca de alta velocidad. El caso asturiano (con 128 millones en los presupuestos de 2017) es particular. Inicialmente, el pasado mes de diciembre el ministro de la Serna había dibujado una fecha difusa, a finales de 2019, como el inicio de la circulación en pruebas de los trenes por la variante de Pajares. Sin embargo, todos estos planes se fueron al traste después del acuerdo presupuestario entre PP y Foro, por la exigencia de estos últimos de reformar el proyecto y adaptarlo al ancho de vía internacional en vez del ibérico, como estaba proyectado en la anterior legislatura con Ana Pastor al frente de Fomento. Esta modificación no sólo influirá en el tipo de tráfico que podrá acoger la infraestructura --y que quedará limitado a los viajeros, quedando las mercancías relegadas a la rampa decimonónica del puerto-- sino que obligará a redactar de nuevo algunos proyectos, levantar parte de la vía ya tendida, con los consecuentes sobrecostes y también demoras. En Fomento se resisten a fijar un plazo para cuándo se abrirá la variante (ahora, según De la Serna, con los dos túneles a la vez) y sólo hablan de «pronto» y tratar de «ajustarse al máximo» a las previsiones; pero nadie espera que estén listos antes de 2020 como mínimo. Pero si De al Serna elude fijar plazos, Rajoy ni siquiera nombró la variante en su discurso.

 El olvido del eje mediterráneo y las críticas catalanas

En su intervención de ayer, Mariano Rajoy olvidó referirse al eje mediterráneo, una infraestructura clave para Cataluña -también para Andalucía, Murcia y la Comunidad Valenciana- que a menudo se utiliza como arma arrojadiza. El portavoz del PDECat en el Senado, Josep Lluís Cleries, aseguró ayer que algunos, como el País Vasco «cobran» por formar parte de España, mientras que Cataluña «paga», dijo en referencia al Cupo vasco.