Los análisis revelaron que los animales murieron por un vertido del colector nº5. La información ha sido remitida a la Fiscalía
05 jul 2017 . Actualizado a las 12:35 h.La Dirección General de Prevención y Control ambiental del Principado ha abierto un expediente por un vertido de hidrocarburos a la ría de Avilés, que tuvo lugar en octubre de 2016 y que provocó la aparición en las aguas de numerosos peces muertos. En una respuesta a una pregunta parlamentaria planteada por el diputado de Podemos Héctor Piernavieja, la Consjería de Infreastructuras detalla además que se ha remitido una propuesta de sanción a la Fiscalía «por si los hechos pudieran ser constitutivos de un delito medioambiental»
Según destaca la consejería, el primer aviso se recibió el 23 de octubre del año pasado tras dar parte del Servicio de Emergencias del Principado de la aparición de peces muertos en la ría de Avilés. Las autoridades tomaron muestras de los ejemplares hallados, del agua de la ría y también «del colector propiedad de la empresa Arcelor Mittal denominado nº5, el más cercano a la zona donde habían aparecido los peces». De estos análisis, se puso de relieve la aparición en los peces muertos de restos de hidrocarburos, en concreto en la necropsia permitió hallar que sus branquias «estaban impreganadas de una sustancia oleosa pardusca y que el líquido analizado contenía naftaleno y otros hirdrocarburos»; el informe concluye que fueron estos elementos los que produjeron «efectos letales directos por impreganción de las branquias y consiguiente sofocación del pez».
Además la respuesta de la Consejería apunta que Arcelor «no tiene autorización para el vertido de hidrocaburos la ría de Avilés» y que las concentraciones de determinados elementos, como amonio y cianuro, en las inmediaciones del colector nº5 «son superiores a los valores límite establecidos en la Autorización Ambiental Integrada ortorgada a la empresa». En su momento, la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies había asegurado que la empresa había conseguido esquivar la sanción porque no se habían recogido muestras de los vertidos, algo ahora desmentido.
El pasado mes de abril, Infraestructuras ya abrió expediente a Arcelor por un escape de gas ácido que despertó preocupación entre la población del concejo y que fue calificado como «muy grave».