La hipertensión, el colesterol y el tabaquismo también pasan factura al riñón

S.D.M. REDACCIÓN

ASTURIAS

Un estudio con participación del HUCA determina que los factores de riesgo cardiovascular elevan la posibilidad de padecer la enfermedad renal crónica

28 sep 2017 . Actualizado a las 19:24 h.

Hipertensión arterial, obesidad, obesidad abdominal, tabaquismo, LDL colesterol elevado, HDL colesterol disminuido, hipertrigliceridemia, diabetes y sedentarismo. Los factores de riesgo cardiovascular también pasan factura al riñón. La acumulación de todas condiciones eleva la posibilidad de padecer la denominada enfermedad renal crónica (ERC). Esto es, al menos, lo que concluye una investigación en la que han participado especialistas del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), junto con colega de los hospitales de Torrecárdenas (Almería), Reina Sofía (Córdoba) y el Doce de Octubre (Madrid). En concreto determinan que la prevalencia de la ERC en pacientes sin factores de riesgo cardiovascular es del 4,5% mientras que se elevó por encima del 52% en pacientes con entre ocho y diez factores de riesgo. El ensayo se realizó con muestras de 11.505 sujetos.

Los expertos de Sociedad Española de Nefrología, a la vista de estos resultados, han destacado la profunda correlación entre las enfermedades del riñón y el corazón y la importancia de mantener estilos de vida saludables para prevenir ambos tipos de patologías. Ha explicado que la prevalencia de la enfermedad renal crónica va subiendo «de forma progresiva y exponencial» en función de la acumulación de factores de riesgo. Con la suma de dos factores de riesgo, afecta ya al 10,4% de la población con sólo dos factores de riesgo. Ese orcentaje se dispara al 52,3% cuando se suman entre ocho y diez. 

La consecuencia directa es la existencia de pacientes con diagnósticos múltiples. El estudio calcula que un 25% de los pacientes con enfermedades cardiovasculares tiene una enfermedad renal crónica, aunque muchos no lo saben, ya que no está diagnosticada. De hecho, la ERC afecta al 10% de la población adulta y a más del 20% de los mayores de 60 años. El porcentaje sube hasta el 40% entre los diabéticos.

La Sociedad Española de Nefrología alerta de que las muertes producidas por la enfermedad renal crónica aumentaron un 82% entre los años 1990 y 2010 en todo el mundo. Este incremento solo lo superaron el VIH/SIDA y la diabetes. El colectivo de expertos lamenta que, pese a lo alarmante de las cifras, siga existiendo «un gran desconocimiento de las enfermedades renales por parte de la población y, en particular, de su relación con la enfermedad cardiovascular».