El Gobierno propone a Iberdrola que venda Lada para evitar el cierre

Luis Ordóñez
Luis Ordóñez REDACCIÓN

ASTURIAS

El presidente del Principado de Asturias, Javier Fernández (d), y el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal (i), tras la firma de un nuevo convenio marco de colaboración para el impulso económico de las comarcas mineras del carbón. EFE/José Luis Cereijido
El presidente del Principado de Asturias, Javier Fernández (d), y el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal (i), tras la firma de un nuevo convenio marco de colaboración para el impulso económico de las comarcas mineras del carbón. EFE/José Luis Cereijido J.L.Cereijido

El ministro Álvaro Nadal destaca en Oviedo que las decisiones sobre el mix energético no pueden quedar sólo en manos de las empresas

20 nov 2017 . Actualizado a las 16:47 h.

El ministro de Energía, Álvaro Nadal se mostró contrario en Oviedo al anuncio de Iberdrola de cerrar la central térmica de Lada; lo hizo durante la firma de un convenio marco sobre los fondos mineros junto al presidente asturiano, Javier Fernández, y con dos ideas clave en su intervención: la de que el mix energético de un país no puede ser decidido únicamente por las empresas, y que para justificar el cierre de una planta deben detallarse criterios de rentabilidad y que para conocerlos con certeza debe asegurarse no que hay ningún otro agente interesado en adquirir ese centro. Nadal no habló de ofertas concretas, podría ser otro operador de energía e, incluso, señaló que las propias industrias consumidoras de esa electricidad, podrían estar interesadas en comprar la térmica; y apuntó que este criterio que maneja el Gobierno no es un argumento ad hoc pensado para el caso de Lada sino que debería ser el mismo para evitar el cierre de cualquier planta productora de energía, en cualquier punto de la geografía del país,y de cualquier sistema, desde las renovables a la nuclear.

«Ayer por la noche fracasaron las negociaciones para formar gobierno en Alemania por dos razones, por la educación y el mix energético» señaló Nadal para el que este circunstancia pone de relieve, que se trata de «una cuestión política» que supera la capacidad de las empresas porque en esta materia deben pesar también los criterios de eficiencia, respeto al medioambiente y garantía del suministro, por ello «el gobierno debe de tener una competencia clara». Nadal lanzó también una advertencia a Iberdrola deslizando la sospecha de que pudiera ocurrir que los planes de cierres de una planta se deban a un interés oculto «para que suban los precios». La única manera, insistió, de conocer si realmente hay un criterio de rentabilidad en esa decisión es «saber si se tiene la capacidad para ser explotada por otro agente» y señaló que el decreto que prepara el Ejecutivo central tiene ese objetivo primordial, que Lada permanezca abierta aunque sea con un cambio en la propiedad.

Ya en su discurso previo, el presidente asturiano, Javier Fernández insistió en la idea ya avanzada el pasado viernes de que el cierre de esa central podría provocar una nueva «reconversión industrial» en la comunidad con consecuencias catastróficas para el empleo. Así, durantte la firma del convenio este lunes, Fernández, resaltó que si de media en España la demanda de la industria al sector energético es de un 23,6% y en Europa un porcentaje similar, del 25,3%, en el caso de Asturias la cifra aumenta hasta el 67,6%. Y apuntó que la industria general el 14% del empleo en la región, con alrededor de 18.000 puestos de trabajo. «Para la supervivencia de esa fortaleza industrial, el precio de la energía y el mantenimiento de las centrales térmicas son factores clave», señaló el presidente asturiano.

La demanda de un sistema que garantice la competitividad de la industria asturiana con una tarifa eléctrica ajustada es una constante del Ejecutivo asturiano desde el comienzo de la legislatura. Al respecto, en su visita a Oviedo, el ministro Nadal cargó (sin citarlo) contra los ejecutivos de Zapatero por, desde su punto de vista, haber hecho una fuerte apuesta por el sector de las renovables cuando aún no eran rentables, criticó también los cambios de la Comisión Europea sobre su valoración de qué se consideran ayudas del Estado a la hora de aprobar vetar los sistemas que se han acordado entre las empresas y el gobierno español y demandó que se tenga en cuenta que el carbón (que se quema en las térmicas) es en buena medida lo que hace posible tener unos precios asequibles en el ámbito doméstico pero que debe compaginarse con la producción en centrales nucleares (que no emiten CO2) para garantizar también el cumplimiento de las restricciones medioambientales.