Las familias del PSOE alejan la expectativa de primarias si Barbón es candidato

Luis Ordóñez
Luis Ordóñez REDACCION

ASTURIAS

Adrián Barbón
Adrián Barbón Alberto Morante

Los críticos desinflan la posibilidad de presentar una candidatura alternativa si el secretario general da el paso

26 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las primarias para la elección del que será cabeza de cartel en las próximas elecciones a la presidencia del Principado ya tienen fecha, y una adelantada. Frente a la perspectiva de que se celebraran en otoño, finalmente la FSA fijó en el calendario el 10 de junio para la cita con las urnas y una campaña relámpago que exigía la presentación de precandidaturas de forma casi inminente, el 11 y 12 de mayo. Pero si las fechas están más que claras, no lo está en absoluto que vaya a haber primarias con dos o más contendientes, y en el sector crítico las expectativas de presentar una candidatura alternativa, más en el caso de que hubiera que enfrentarse al propio Adrián Barbón, a día de hoy son más que lejanas.

Barbón defendió durante su campaña a la Secretaría General que mantendría el modelo de bicefalia, tradicional en el socialismo asturiano, de una persona al frente del partido y otra en el cartel electoral, pero con el paso de los meses la prolongación de la tensión interna que no termina de zanjarse y también el hecho de que el propio Pedro Sánchez le señalara en un mitin en Oviedo como «futuro y la esperanza para Asturias a partir de mayo de 2019» han hecho que en su entorno le apremien a desdecirse y dar el paso. Los críticos dan por hecho que lo hará y si bien hay quien defiende plantear una candidatura alternativa, otros creen que sería una contienda sin sentido y además complicada porque «no hay cultura de enfrentarse al secretario general» e incluso en las agrupaciones locales con mayor peso de la resistencia al sanchismo desean que la campaña de las municipales se desarrolle en un clima de calma en el seno del partido.

En el sector más cercano a Barbón creen que debería presentarse y justifican el cambio de opinión porque si en un primer momento defendió la bicefalia como garantía de estabilidad en el partido, «paradójicamente con el paso del tiempo se ha visto que sería al contrario». Afirman que el secretario general lo está meditando, que escucha a la militancia en sus reuniones con las distintas agrupaciones sociales y le animan a que se presente y zanje de esta forma la división interna.

¿Lo haría? En declaraciones recogidas por la agencia Europa Press, el que fuera su contrincante en las primarias a la Secretaría General de la FSA, José María Pérez, saludaba el hecho de que las primarias se celebraran pronto y señalaba que incluso muchos de los militantes que le habían apoyado contra Barbón «no ven prioritario en este momento ir a una confrontación interna, sino tener un proyecto sólido que presentar al conjunto de la sociedad asturiana». 

Entre los críticos se ha barajado la posibilidad de que de dos consejeros, el de Presidencia, Guillermo Martínez, y el de Infraestructuras, Fernando Lastra, uno pudiera dar el paso y presentar su candidatura pero con el transcurso de los primeros días de esta semana, después de que se anunciara el calendario del proceso, «los teléfonos no están sonando» para tratar de buscar apoyos; aunque no descartan que pudieran hacerlo en un determinado momento. Pero también hay un sector que defiende que debe ser el sanchismo quien asuma el conjunto de la campaña, la elaboración del programa y también la candidatura a la presidencia, de manera que si los resultados no fueran todo lo buenos que se esperan, asuman también en solitario las consecuencias. Entre ellos señalan también que si Barbón decidiera presentarse tendría que explicar la contradicción de haber dicho antes que no lo haría pero al par resaltan que sería positivo que se aclarara el panorama y que los ciudadanos contaran pronto con un referente de quién será su candidato a la hora de acudir a las elecciones.