Oposiciones del Sespa para resolver historias sangrantes: interinos con 30 años de antigüedad

S.D.M. REDACCIÓN

ASTURIAS

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Orlowski

Algunas categorías profesionales no han tenido una oposición desde las transferencias en el 2002

10 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay trabajadores temporales en el Servicio de Salud del Principado (Sespa) que tienen contratos en vigor desde finales de los años 80. No es ningún mito. Los profesionales de la casa les ponen nombres y apellidos y el destino en el que se encuentran. A diferencia de lo que ocurre en Educación, con oposiciones todos los años, en los que se alternan los cuerpos de Infantil y Primaria con los de Secundaria y FP, en la Sanidad asturiana hay categorías profesionales que llevan décadas sin oposiciones. Es sangrante el caso de los celadores, debido tanto al volumen de personal como al envejecimiento de la plantilla. Desde las transferencias sanitarias no han tenido ni una oferta de empleo. La lista hace muchos años que se agotó y desde entonces la Administración tira de la lista del paro, sin que se sepa muy bien el criterio que se utiliza para elegir al personal. Cuenta, por ejemplo, Alejandro González, de CCOO, que tan pronto te puedes encontrar a un chaval joven que estaba cobrando la prestación como a un trabajador al borde de la jubilación parado de larga duración.

El Sespa ha publicado en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) seis resoluciones convocando un total de 2.013 plazas de seis categorías diferentes: auxiliar de enfermería, enfermería, celador auxiliar administrativo, fisioterapeuta y matrona. Todas estas plazas están incluidas en las ofertas de empleo público de la Administración del Principados para los años 2016 y 2017, que fueron aprobadas por un acuerdo del Consejo de Gobierno de 14 de diciembre de 2017. Dentro del número total se encuentran las de libre convocatoria y las de cupo reservado para discapacidad y también las de promoción interna. Es la mayor oferta de plazas realizada por el Principado para sus servicios de salud.

Alejandro González explica que estas oposiciones en algunas categorías eran de extrema necesidad para tratar de estabilizar una plantilla con unos niveles de interinidad alarmantes. Tanto es así que cuenta casos que pueden parecer rocambolescos pero que se dan en el día a día. Cita la situación de algunos facultativos que en las últimas oposiciones sacaron plaza en hospitales de las alas y que prefirieron renunciar y no tomar posesión para seguir como interinos en hospitales del área central. La mejora de las condiciones socioeconómicas de los interinos, como el cobro de los trienios conseguido en los tribunales, hace que muchos profesionales, sanitarios y no sanitarios, hagan sus números para ver qué les compensa más.

Lo que no ha sido posible modificar es el pacto de contrataciones que rige el proceso. Hubo diferentes propuestas sobre la mesa de los sindicatos pero no se llegó a alcanzar un acuerdo para modificar las condiciones que regirán tanto la propia oposición como la gestión posterior de las listas. Los que ya están en la lista no necesitarán presentarse para poder seguir dentro pero sí tendrán la posibilidad de actualizar la puntuación en la fase de méritos, tanto por experiencia como por otros motivos, ya sean titulaciones, cursos,...

El responsable de CSIF, Sergio Peña, explica que las listas seguirán siendo imprescindibles para garantizar el buen funcionamiento de la sanidad pública. Asegura que solo la cobertura del absentismo habitual, por bajas o motivos personales, suponen miles de contratos al año. Calcula que está en torno al 10%, un porcentaje nada abrumador. A eso añade también el envejecimiento de las plantillas de algunas categorías profesionales y las jubilaciones que le esperan a la vuelta de la esquina. Las listas deberán cubrir esos otros huecos. Es algo sobre lo que ya se ha alertado en el caso del personal facultativo. La escasez de médicos especialistas en algunas categorías como la Medicina de Familia ya es alarmante. Pero Peña indica que pasarán en otras categorías menos cualificadas. Los celadores vuelven a ser el ejemplo que cita.