El presidente de la Federación Asturiana de Empresarios apunta que sería más bien «catastrófico» si esto fuera el inicio del desmantelamiento de la cabecera
09 may 2019 . Actualizado a las 14:21 h.El presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Belarmino Feito, confía en que la anunciada bajada de producción de Arcelor sea un tema «puntual» y que se pueda corregir lo que afecta a la competitividad de estas plantas y de la siderurgia europea en general, informa Europa Press. Feito, antes de reunirse con el candidato del PP a la Alcaldía de Gijón, Alberto López-Asenjo en la sede gijonesa de FADE, ha apuntado que sería más bien «catastrófico» si esto fuera el inicio del desmantelamiento de la cabecera, y, por tanto, de la siderurgia en España. «No quiero pensar en esa posibilidad», ha remarcado.
Ha abogado, en este caso, por que por parte de la Unión Europea se tomen las medidas oportunas de protección a la industria europea y que desde el Gobierno de España se tome conciencia de que es preciso dar solución al tema de la tarifa eléctrica tanto para las electrointensivas como a la industria transformadora, para que el problema «no vaya más allá».
Relacionado con ello y al impacto en El Musel, ha apuntado que le llama la atención que hay alguna tendencia de tráficos o posibilidad de canalizar minerales hacia el Norte de África, con la puesta en marcha de las térmicas en Marruecos, como por ejemplo el carbón ruso que se está acopiando en El Puerto de Gijón.
Gijón, un pilar básico
Feito ha señalado, por otro lado, que tienen claro que las ciudades van a ser un motor de desarrollo económico de las regiones, a lo que ha incidido en que Gijón debe ser un pilar básico en la «futura ciudad-región» de Asturias. Ha recalcado, eso sí, que, ligados a la ciudad, hay proyectos pendientes como la Zona de Actividades Logísticas e Industriales del Principado de Asturias (Zalia) y la reanudación del servicio de la Autopista del Mar, como también tiene que ver con Gijón el puerto de El Musel.
Asimismo, ha recordado que FADE tiene su propio programa económico, al margen de lo que puedan proponer los diferentes partidos políticos en sus programas electorales, en el que se plantean 22 acciones «ineludibles», a ojos de la patronal empresarial.