¿Cómo ven los Erasmus a los asturianos?

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ASTURIAS

Los estudiantes entrevistados
Los estudiantes entrevistados

Cinco estudiantes internacionales revelan las impresiones que les ha causado su paso por la Universidad de Oviedo

17 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El curso escolar está terminando, los campus universitarios se encuentran cada vez más vacíos y los Erasmus que han elegido Oviedo como su ciudad de destino están ya despidiéndose de Asturias. España resulta una opción atractiva entre los distintos destinos ofertados. En el Ranking Europeo de Enseñanza 2018, presentado por el Times Higher Education, las universidades españolas presentan el segundo mejor balance entre estudiantes recibidos y enviados de los grande países de la Unión Europea. Asturias no se queda atrás, ya que sumando los diferentes convenios que tiene la Universidad de Oviedo, este curso escolar las aulas han acogido a 763 estudiantes internacionales. Johanna Bustillos, Vinicius Gomes Barros, Daniela Aguirre Zapata, Karolina Baran y Laure Plusquellec son parte de estos estudiantes internacionales que llegan cada año. Antes de volver a sus países, han hablado de cómo ven la ciudad de Oviedo, a sus gentes, sus costumbres, y en general, como es Asturias a ojos de los extranjeros.

Johanna Bustillos y Laure Plusquellec son francesas y llevan todo el año estudiando en el campus de Filosofía y Letras. Para Johanna, España es su país favorito y decidió probar con Asturias, al igual que su compañera Laure, por recomendación de unos amigos que ya habían estado y que habían vuelto encantados con la experiencia. Después de haber pasado aquí todo el año, Johanna se lleva muy buen recuerdo de la ciudad, del paisaje y de las gentes, que describe como «amables y sonrientes». Laure añade que el encanto del paisaje reside en lo ecléctico que es: «Hay mar, montaña, tierra, vegetación». 

La comida es algo que Johanna no ha disfrutado tanto, lo que sí le ha llamado la atención son los mercados típicos de Asturias. Laure, por el contrario, dice que la comida asturiana «es la mejor de España». Menciona entre sus platos favoritos «el cachopo, el bacalao, el chorizo y las tapas», y por supuesto, la sidra. En el ámbito universitario han encontrado bastantes diferencias. Al parecer, los trabajos y redacciones son más comunes aquí que en Francia, dónde además, las notas son sobre 20 en lugar de sobre 10. Johanna viene de una universidad en la que todas las facultades están unidas en un gran campus y se ha sorprendido de la distribución de la Universidad de Oviedo. Ambas concuerdan en que en Francia las clases constan de muchos más alumnos y que los profesores no son tan cercanos, que aquí el trato les ha parecido más informal.

Daniela Aguirre Zapata viene de Perú y ha realizado un semestre de Administración de Empresas en el campus del Cristo. Está encantada con la ciudad y se ha sentido muy a gusto con todas las personas que ha conocido. Aprecia de Oviedo que todo esté tan limpio, que se pueda llegar andando a todas partes y que sea tan segura. Alaba, además, el sistema de reciclaje

Aunque ha echado mucho de menos los ajís (variedad de pimiento picante) y sazonadores de su país, con los cuales estaba acostumbrada a cocinar, pero se lleva a casa el descubrimiento de la tortilla de patata (afirma que «la del Mercadona sobre todo»). Respecto al tiempo, dice que «el cuerpo se adapta rápido» y que a pesar de la diferencia de clima existente entre Perú Y Asturias, no lo ha sufrido demasiado. También ha notado que al salir de fiesta los jóvenes no se arreglan tanto, describe el estilo como más «fresco». Sobre la universidad le ha sorprendido que la asistencia no sea obligatoria, ya que en Perú los tres primeros años está prohibido ausentarse de las clases. 

Vinicius Gomes Barros es de Brasil y está realizando un doctorado de gestión en Enfermería. Ha llegado a Oviedo porque forma parte de un proyecto multicéntrico entre Brasil, Portugal y España, y de estos dos últimos, le faltaba por visitar España. Comenta sobre Oviedo que nunca ha visto «una ciudad tan organizada». Además, debido a su doctorado, ha pasado mucho tiempo en el Hospital Central Universitario de Asturias (HUCA), dónde se ha encontrado muy a gusto, ya que «el HUCA tiene una infraestructura increíble». También menciona que la red de urgencias de Asturias le encanta: «está muy bien planteada y organizada». Considera además que la Universidad de Oviedo tiene profesores muy buenos y que ha aprendido mucho. Una diferencia curiosa que encuentra entre la comida de uno y otro lugar es que aquí comemos mucho pan y patatas, mientras que en Brasil son más frecuentes el arroz y los frijoles.

Recuerda con especial cariño una actividad a la que asistió con Erasmus Sudent Network Oviedo (ESN Oviedo) llamada «Erasmus in school», en la que pasaron un fin de semana en Grandas de Salime. La experiencia le gustó especialmente porque tuvieron la oportunidad de salir de las ciudades más grandes, en las que normalmente se quedan los erasmus, y ver otras zonas de Asturias, conocerla un poco mejor. De esta forma, pudieron explorar «lo mejor de la naturaleza asturiana». Se siente «muy acogido, la gente es muy buena» y en general, comenta que ha tenido «un año increíble». «A mí me encanta Asturias, también es mi patria y es un lugar que voy a guardar en mi corazón toda la vida, cuando pueda voy a volver», concluye.

Karolina Baran ha venido desde Polonia a estudiar medicina y antes de llegar no conocía nada sobre el norte de España, dice estar «muy sorprendida de que existiera algo tan distinto al sur». Pero ha quedado encantada con lo cerca que está la naturaleza y todas las rutas que se pueden hacer. En sus palabras, «es un paraíso». La comida le ha encantado, sobre todo el cachopo y el marisco. También la sidra y «todas las costumbres que la rodean». Todo el mundo es muy simpático, sobre todo está encantada con la gente de ESN que son muy «amables y dedicados». Resalta como siempre les «ayudaban y organizaban multitud de eventos».

Al igual que Vinicius, Karolina, ha pasado mucho tiempo en el hospital realizando sus prácticas. Sobre su experiencia explica que ha podido aprender mucho y que le ha parecido que se trataba a los estudiantes «con más respeto». Por el contrario, en Polonia dice que las clases son menos teóricas y que les dejan realizar ejercicios más prácticos.

Todos concuerdan que la experiencia erasmus va a ser difícil de olvidar y tras haber conocido diferentes lugares, personas y haber vivido nuevas experiencias, solo les queda disfrutar de los últimos momentos en Asturias.