Un asturiano se suma a un manifiesto universitario en defensa de los menores extranjeros no acompañados
ASTURIAS
Más de 200 expertos presentan un escrito en el que denuncian «la criminalización» de estos niños y reclaman a las administraciones «que respeten sus derechos»
16 ago 2019 . Actualizado a las 08:35 h.Alarmados por las reacciones que se están produciendo en las últimas semanas en diferentes puntos de españa contra los menores extranjeros no acompañados, han decidido dar un paso al frente. Más de 200 catedráticos y profesores titulares españoles han firmado un manifiesto contra la criminalización de estos niños que llegan solos a España y reclaman a las administraciones que respeten sus derechos. Proponen la aprobación de un plan nacional sobre inmigración infantil y juvenil, que se centre en sus necesidades desde una perspectiva global y no solo legal. Es decir, que se atienda también desde el punto de visto sociológico y psicológico. Este escrito ha sido impulsado por el Observatorio Criminológico del Sistema Penal ante la Inmigración de la Universidad de Málaga pero ha encontrado un rápido respaldo en instituciones académicas de todo el país. También en la Universidad de Oviedo. Uno de los que se han adherido es Luis Roca Agapito, profesor titular del departamento de Ciencias Jurídicas Básicas.
¿Cuáles son esas noticias que han puesto en alerta a los expertos universitarios de todo el país? Se trata básicamente de movilizaciones vecinales contra los centros de menores, alegando el incremento de la peligrosidad. El propio manifiesto detalla que esto ha sucedido en el barrio de la Macarena, en Sevilla;en El Masnou, en Barcelona o en Hortaleza, en Madrid, por el centro de protección, donde una organización ultraderechista colocó pancartas racistas. Estos mensajes también han encontrado eco en las redes sociales. Los expertos aseguran que «se están difundiendo bulos sobre la autoría de graves hechos delictivos por parte de menores extranjeros no acompañados. Los medios de comunicación, con cierta frecuencia, resaltan en sus titulares aspectos negativos sobre estos chicos». Frente a esa peligrosa marea, proponen reflexión y medidas.
«Estos discursos y acciones incitan al racismo y al odio, distorsionan la complejidad de los procesos migratorios que viven estos chicos y chicas, alimentan falsas ideas y generan prejuicios que bloquean la convivencia e intentan romper la cohesión social», sostiene el escrito. Cree que es necesario dar la vuelta al planteamiento y ver las migraciones juveniles de otro modo. Señala que en este momento se tienen «la oportunidad para reformular la forma de gestionar la diversidad cultural en el ámbito de la infancia, así como para profundizar en el acompañamiento e intervención desde el trabajo interdisciplinar en red». Reconoce que «la movilidad infantil y juvenil en este mundo globalizado no es un problema, sino una ventana de oportunidad para pensar y evaluar la calidad del estado de derecho en nuestras sociedades democráticas».
El discurso es totalmente contrario al que sostienen los que se movilizan. «Los menores -niños, niñas y adolescentes- extranjeros no acompañados no son peligrosos, están en situación de peligro. Y toda la sociedad en su conjunto debe contribuir a su protección», explican los expertos. Todas las estrategias educativas y de bienestar que se puedan poner en marcha con los menores, para promver su desarrllo integral, contribuye a su maduración y a que consigan por sí mismos logros académicos y en sus relaciones personaes. Así se les ofrecen oportunidad, se reduce el riesgo de que caigan en la delincuencia y se incrementa la posibilidad de contar con una sociedad integradora y responsable.
Los especialistas animan a las administraciones a intentarlo, a salir de la actual parálisis. Reclaman que el Gobierno español diseñe un plan nacional sobre inmigración infantil y juvenil, que eliminen las barreras para incluir a estos menores en el sistema educativo, para evitar internalos en macroinstituciones, para promover su inserción laboral y para apoyarles en su transición a la vida adulta. Instan a que el Ministerio Fiscal «haga prevalecer la protección de la infancia, haciendo cumplir la normativa y las sentencias de los tribunales nacionales e internacionales que ordenan la defensa y tutela de los derechos fundamentales de estas los niños, niñas y adolescentes menores de edad, asumiendo con firmeza las directrices del Comité de los Derechos del Niño».
También tienen reivindicaciones para los medios de comunicación. Solicitan que no colaboren en la criminalización de estos niños, ni tampoco en la difusión de discursos estereotipados y racistas. Reclaman que se deje de usar el acrónimo Mena, al considerar que tiene una connotación peoyorativa, y se que centren en profundizar en los derechos de estos migrantes y en las causas que les fuerzan a irse solos.