El Fapas sale en defensa de una especie que ha sido criticada por supuestos ataques al ganado
22 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.A los buitres leonados les ha salido un aliado en Asturias. El Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas) ha salido al paso de las informaciones y comentarios en redes sociales en los que se asegura que esta especie ataca al ganado y ha respondido con contundencia. Los ecologistas aseguran que se trata de un «bulo», sostienen que el animal se alimenta de carroña y aportan la opinión de un experto para argumentar su tesis.
El Fapas explica que los buitres «no tienen capacidad de apresar, sujetar y matar». Esta ave necrófaga está continuamente en busca de la carroña que se puede encontrar en el campo «y así evitan la transmisión de posibles enfermedades al quedar el cadáver sin consumir», afirman los ecologistas. La organización asegura que lleva trabajando 35 años con los buitres, tiempo en el que ha aportado, asegura, centenares de carroñas a los viejos comederos, recogido animales de todo tipo y tenido relación con cientos de ganaderos. «Jamás presenciamos ni conocimos ni tan siquiera una actitud oportunista de que buitres mataran a un animal con vida, por muy malherido que se encontrase», añade.
El Fapas tacha de falsas esas informaciones y señala un culpable: los cazadores. «Desde el mundo de la caza se suman a la creación de bulos, narrando de manera mentirosa episodios absolutamente naturales», sostiene la organización. Para corroborar su teoría cita una noticia publicada en una revista cinegética que narra «cómo los buitres atacan a animales muertos. Muertos por los cazadores y que son consumidos por los buitres una vez que están, eso, precisamente muertos» señala el colectivo.
Además, los ecologistas también incluyen en su defensa de los buitres la opinión de un experto en aves necrófagas. En una entrevista realizada por EFE y publicada por eldiario.es, el profesor de investigación de la Estación Biológica de Doñana (CSIC) José Antonio Donázar califica de «barbaridad científica» los «bulos» que defienden que los buitres atacan al ganado.
Donázar es autor de más de cien estudios sobre aves carroñeras de varios continentes y director de una veintena de investigaciones sobre estas especies. Se muestra «preocupado» e «indignado» por las crecientes denuncias y deja claro que «un buitre no puede ser un predador porque sus garras no están preparadas para agarrar una presa, como las águilas, y su pico y su cuello para lo que están preparados es para entrar en un animal ya muerto; morfológicamente no es posible que un buitre se comporte como un predador», enfatiza.
Lo que sí admite el profesor es que «en alguna contada ocasión» algún buitre pueda comportarse de forma «oportunista y aprovechar un mal parto o un animal moribundo para comérselo, que no depredarlo; puede ocurrir, pero son y han sido siempre casos excepcionales», concluye.