Quemaduras con aceite hirviendo, golpes con palos de escobas y violaciones: el relato de una víctima de maltrato

La Voz REDACCIÓN

ASTURIAS

Sede de la Audiencia Provincial en Oviedo
Sede de la Audiencia Provincial en Oviedo

La Fiscalía y la acusación particular elevan a 21 años su petición de condena al acusado de maltratar a la madre de su hija y obligarla a mantener relaciones sexuales

07 nov 2019 . Actualizado a las 15:05 h.

La Fiscalía y la acusación particular han elevado de 12 a 21 años su petición de condena al acusado de maltratar de forma habitual a la madre de su hija y obligarla a mantener relaciones sexuales, al considerar que cometió agresión sexual y no abuso sexual como solicitaban inicialmente. El acusado se ha negado a llegar a acuerdo alguno con las acusaciones que, en un primer momento, le ofrecieron rebajar la pena de los doce años a los cinco años de cárcel si realizaba un reconocimiento explícito de los hechos durante el juicio en la Audiencia Provincial. Al escuchar que se iba a mantener la acusación por un delito sexual, el acusado descartó por completo el pacto, lo que llevó a las acusaciones a mantener su autoría en los delitos de maltrato habitual y maltrato familiar y a cambiar su calificación de delito continuado de abuso a agresión sexual, lo que conlleva mayor condena.

El tribunal de la Sección Tercera ha celebrado la primera sesión a puerta cerrada, pero, según fuentes judiciales, el acusado ha negado los hechos y ha asegurado que no agredió ni física, ni sexualmente a su pareja, de la que tiene vigente una orden de alejamiento, y que la víctima «bebía y mezclaba alcohol y pastillas». La víctima, por el contrario, ha mantenido que desde que inició la convivencia con el acusado, en 2013, éste le agredió en varias ocasiones e incluso también maltrató a la hija que ambos tuvieron en 2015.

Según fuentes judiciales, la mujer ha declarado que las agresiones físicas se iniciaron a los tres meses de empezar a convivir, llegando a romperle el palo de una escoba en la espalda, a tirarle aceite hirviendo por una mano o a darle patadas por el cuerpo mientras estaba acostada con la niña en la cama, tanto en la casa familiar como en la calle. También manifestó ante el tribunal que el acusado llegó a obligarla en numerosas ocasiones a mantener relaciones sexuales, mientas le insultaba y le decía que «no valía para nada».

Dos vecinos del mismo edificio donde la pareja residía, en Gijón, han prestado testimonio en la vista oral, que se reanudará el próximo día 18 de este mes con los informes de conclusiones de las partes, informa EFE.

No obstante, en la sesión de hoy, la Fiscalía y la abogada Luján Blanco, que ejercita la acusación particular, han anunciado que pedirán 21 años de cárcel, una medida de alejamiento a menos de 500 metros de la víctima y de comunicarse por cualquier medio con ella, incluyendo redes sociales, durante 15 años, así como una indemnización de 6.000 euros. Además, ambas acusaciones solicitarán que se imponga al procesado la medida de libertad vigilada, a cumplir con posterioridad a la pena privativa de libertad, durante 8 años.

El abogado defensor, Alejandro Cabezas, ha interesado la libre absolución al sostener que su representado no maltrató, ni agredió sexualmente a su expareja sentimental.