El Principado señala que no le ha denegado el tratamiento pero Villoria muestra una carta firmada por el gerente del área IV
29 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Ya está empadronado y a la espera de conseguir la tarjeta sanitaria definitiva. Baraja la posibilidad de acudir a unas urgencias hospitalarias para acelerar su caso. Juan Carlos Villoria, el asturiano diagnosticado con cáncer de hígado que se ha trasladado de comunidad autónoma, continúa con las gestiones necesarias para conseguir el tratamiento con Regorafenib, la terapia prescrita por su oncóloga del Hospital Universitario Central de Astruias (HUCA). La Consejería de Sanidad asegura que «nunca se deja a ningún paciente sin fármacos» y que, «si por motivos clínicos» no puede recibir la medicación que se propone, entonces siempre se le ofrece una alternativa. «El criterio nunca es económico. Siempre es médico», ha insistido el Gobierno del Principado. También ha señalado que «hasta ayer -miércoles 27 de noviembre- la omisión del Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios (Curmp) no había recibido ninguna petición para autorizar el tratamiento del paciente».
Villoria lo rebate por escrito. Muestra la carta firmada por el gerente del área sanitaria IV y, por tanto, gerente también del HUCA, Luis Hevia, que le llegó esta misma semana. Está fechada el 20 de noviembre y responde a un escrito presentado por el propio paciente el 14 de noviembre, al día siguiente de que su oncóloga le comunicara que el tumor estaba creciendo a gran ritmo y que se había extendido a otros órganos. La secuencia temporal coincide, por tanto, con la que había defendido Villoria desde el principio.
En ese documento, Hevia responde que el procedimiento establecido en Asturias para el suministro de fármacos como el Regorafenib implica a valoración de la CURMP (Comisión de Uso Racional d elos Medicamentos y los Productos Sanitarios) del Sespa, que es el órgano competente. El gerente añade que la CURMP «ya se ha pronunciado acerca del medicamento desestimándolo» y que este hecho «se ha puesto en conocimiento» de la doctora que le lleva. «No sé qué otra cosa puedo entender de esta carta», explica Villoria tras saber que Sanidad niega tener conocimiento de su caso.
No tiene la carta en sus manos porque ya había salido camino de su «exilio sanitario» cuando llegó. Sabía por adelantando lo que iba a pasar porque se lo habían advertido, así que había adoptado la decisión de abandonar Asturias y lo había hecho. Su hijo fue la persona encargada de rasgar el sobre. Villoria cuenta con una imagen enviada por Whatsapp en la que se puede leer sin dificultad el escueto párrafo de respuesta del gerente del área IV. Nadie se ha vuelto a poner en contacto con él. A media tarde de ayer no había recibido ningún tipo de comunicación del Sespa.
Su familia se muestra indignada con la situación que se ha generado y con que se esté poniendo en duda su credibilidad. Se preguntan cómo alguien puede pensar que un paciente con este tipo de diagnóstico va a denunciar algo que no es cierto. «Juan Carlos no sabe de los procedimientos de la administración. Ninguno lo sabemos. Pero esa carta deja claro que se le ha denegado», señala su primo Mario Suárez del Fueyo. Sus sobrinos continúan con la campaña de recogida de firmas a través de una plataforma en internet.
