La reconversión llega a los bares: cierra un local cada tres días

Marcos Gutiérrez ASTURIAS

ASTURIAS

Sidrería El Ovetense
Sidrería El Ovetense

La región pierde una media de 111 establecimientos al año desde el 2010

12 dic 2019 . Actualizado a las 16:35 h.

El bar y el chigre tradicional, al que antes se acudía a socializar, charlar y conectar con amistades sigue sufriendo en la era de las redes sociales. Su condición de punto de encuentro y cruce de caminos pierde fuelle dentro del gran segmento de la hostelería, fruto de los cambios en la sociedad y los hábitos de los ciudadanos. El Principado ha perdido 889 bares desde 2010, una media aproximada de 111 al año.

De acuerdo con las cifras que se recogen en el Anuario de la Hostelería de España 2019, el sector en Asturias registró el año pasado 8.499 establecimientos. De éstos, más del 83% pertenece a la rama de restauración, dónde están empleados 26.100 trabajadores. En 2018 solo el sector hostelero facturó 1.943 millones de euros, lo que representa el 5,6% de la riqueza de la región. En el conjunto de actividades, el turismo aporta al Principado cerca de un 11% del PIB.

En el análisis que ofrece este informe en relación al Principado de Asturias, en el sector aumentó levemente (de 8.469 a 8.499) el número de establecimientos por segundo año consecutivo después de cuatro años seguidos de descensos, pese a que el censo de bares continúa cayendo (-1,5% con respecto a 2017). En efecto, son 5.370 los establecimientos de barra que había abiertos en el momento de la realización del estudio. En 2010 había 6.259 bares en la región, lo que supone un desplome ligeramente superior al 14%.

De acuerdo con el informe de la patronal de la hostelería a nivel nacional, mientras que la facturación global de este segmento de actividad en el país aumentó un 18% entre 2010 y 2018, hasta los 123.600 millones de euros, en Asturias cayó un 7,6%.

Datos nacionales

La hostelería española volvió a superar los 300.000 establecimientos en 2018 tras un registrar récord de empleo, con una plantilla de 1,7 millones de trabajadores (71.000 más que en 2017) y elevar su facturación, hasta los 123.612 millones de euros. No obstante, el sector experimentó un crecimiento más moderado que en 2017, aunque la evolución se ha mantenido en positivo. Así, el conjunto de la hostelería facturó 123.612 millones de euros, lo que supone un 3,1% más que en el ejercicio precedente.

Cerca de 35.000 de los establecimientos corresponden al alojamiento, mientras que los 280.000 de restauración son cerca del 90% del total.

La nota negativa viene de los bares (183.306 establecimientos en España), con una caída de 1.124 establecimientos con respecto a 2017. En los últimos ocho años han desaparecido una media de 2.400 locales de este tipo cada año.

«Se están cerrando al año entre 2.000 y 3.000 bares. Vemos que se están cerrando establecimientos de pequeño tamaño, mientras que se están abriendo restaurantes, sobre todo en zonas rurales con depresión demográfica como Castilla y León, Castilla La Mancha y La Rioja, es más allá de la España vaciada, también ocurre en Murcia», indica Emilio Gallego, secretario general de Hostelería de España.