Barbón apela al patriotismo de los asturianos: «No va a ser fácil vencer al coronavirus»

Susana D. Machargo

ASTURIAS

El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón (i), acompañado del consejero de Salud, Pablo Fernández (d)
El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón (i), acompañado del consejero de Salud, Pablo Fernández (d) J.L.Cereijido

El presidente del Principado reclama que se cumplan todas las medidas de contención y que no se extienda bulos. Reclama que no se generen «debate cutres»

12 mar 2020 . Actualizado a las 21:36 h.

No es una responsabilidad exclusiva de los gobiernos ni tampoco de la ciudadanía. La batalla contra la trasmisión del coronavirus y en defensa de la sostenibilidad del sistema sanitario es cosa de todos. El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha apelado a la emotividad y a la responsabilidad para presentar un acuerdo del Consejo de Gobierno extraordinario con una completa batería de medidas para meter en cintura al COVID-19, entre las que destaca la decisión de cancelar toda la actividad lectiva presencial en Asturias, de las guarderías, a la Universidad, las escuelas de idiomas y artísticas o la formación de adultos. «Nunca, nunca, en nuestro breve recorrido autonómico, Asturias se ha enfrentado a una situación similar», ha defendido. Así que ha hecho un llamamiento a la unidad y a la responsabilidad, a aparcar «los debate cutres» y ha apelado «al patriotismo de los asturianos» para vencer en lo que ha calificado de batalla. ¿Qué papel le toca a la ciudadanía? Respetar escrupulosamente los consejos y limitaciones decretados por los expertos, no extender ni bulos ni noticias falsas y tampoco contagiarse del pánico.

Así lo ha explicado flanqueado por la portavoz del Gobierno, la consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez; y el consejero de Salud, Pablo Fernández, que ha reconocido que su larga trayectoria como cirujano le ha servido para poder enfrentar esta crisis con mayor templanza. La plana mayor del Ejecutivo ha garantizado que no habrá problemas de desabastecimiento de productos básicos y que se están adoptando todas las medidas para que el sistema sanitario resista el envite, con contrataciones de profesionales y compra de material que podría ser necesario, como los respiradores. Están dispuestos a modificar la fecha de la prueba de acceso a la Universidad, la EBAU, si es necesario y a revisar también el periodo de cierre de todos los centros educativos, que por el momento es de 14 días naturales a contar desde mañana, viernes, 13 de marzo.

Evitar el colapso sanitario

«No es un tema menor. De cómo lo hagamos depende que seamos capaces de contener el virus y no colapsar el sistema sanitario», ha insistido Barbón. Eso es lo que está en juego y, por esa razón, intenta ganarse la complicidad de los asturianos y no su miedo. Así que ha pedido que se sigan las instrucciones, que los niños que ya no van a ir a clase no se agrupen, que no se participe en grandes concentraciones, que no se acuda de manera innecesaria a los centros de salud y hospitales, que se llame al 112 Asturias si se teme estar infectado, que se extreme la higiene, se fomente el teletrabajo, se mejore la conciliación, se retrinjan las actividades sociales. 

Ha matizado que los datos actuales de la enfermedad en Asturias -con 49 positivos, entre los que hay un fallecido y un alta- sitúan a la región en los ratios más bajos de España en la proporción de afectados por número de habitantes. Sin embargo, esas cifras no son motivo para relajarse. Más bien, cree que hay margen para trabajar. Tanto Barbón como Pablo Fernández han insistido en que la epidemia seguirá creciendo, en que habrá más casos y en que se pondrá a prueba todo el sistema

«No va a ser fácil. Será una batalla dura, compleja y difícil», ha insistido con el mismo lenguaje patriótico Barbón. A su lado el consejero no ha querido hablar de plazos sobre la duración de la epidemia.  Ha garantizado que el Ejecutivo está preparado y coordinado con todos aquellos que son necesarios, como los expertos en epidemiología, el resto de las comunidades autónomas o el propio Ministerio de Sanidad. También ha advertido de que va a ser largo. Ha recordado que en China llevan tres meses, así que hay que prepararse para ser más resistentes. 

El Gobierno del Principado, en cambio, ni ha querido entrar en otros terrenos, como el económico. Las patronales han empezado a alertar de las pérdidas que esta crisis sanitaria va a generar y de la necesidad de empezar a pensar en ellas. La hostelería ya habla de cierres. Grandes compañías planean ERTEs. Barbón se ha limitado a decir que entiende la situación, que comprende que va a ser «un freno económico» pero también que en estos momentos «hay que anteponer la salud pública». Ha explicado que el presidente, Pedro Sánchez, ya ha hablado de este tema y que está en contacto con sindical y patronales, «a través de videoconferencias», ha bromeado.

Dudas por despejar

La resolución aprobada es extensa. Son trece páginas de medidas en todos los ámbitos de la vida pública y privada regional, con cancelaciones, aplazamientos, consejos, limitaciones, recomendaciones. Sin embargo, quedan muchas dudas por despejar. Barbón ha explicado que cada consejería trabajará en el desarrollo de su parte y a Educación le toca una gran parte.

No se sabe qué va a pasar con los docentes que, por el momento, tendrán que seguir asistiendo a sus puestos de trabajo, porque los centros no se van a cerrar. Eso está causando bastante molestar entre los sindicatos, que no entienden que se esté llamando al teletrabajo en otros colectivos y ellos tengan que acudir al colegio. El presidente ha reconocido que se ha adoptado la medida más urgente, que es la paralización, y que todo lo demás habrá que ir construyéndolo a posterior. Hay que aclarar qué va a pasar con las propias evaluaciones y, más trascendental aún, con la prueba de acceso a la Universidad, aunque el propio Barbón ya ha apuntado la posibilidad de modificar la fecha.

Tampoco son definitivos los 14 días en los que se paraliza todo el sistema educativo. Todo dependerá de cómo evolucione la trasmisión. Tanto el presidente del Principado como el consejero de Salud lo han advertido. Es una primera fecha, una primera aproximación, que quedará sujeta a revisión en función de la evolución. Es el mismo mecanismo que están siguiendo el resto de comunidades.

No se sabe cuánto personal sanitario ni cuántos medios van a ser necesarios pero el consejero de Salud indica que se han iniciado todas las contrataciones posibles para estar prevenidos. Ahora, ha explicado, que todavía hay «holgura» pero que todo se complicará en las próximas semanas. Por eso van a ser necesarios desde celadores a médicos de todas las especialidades. Y ha advertido que habrá muchos más enfermos y que algunos de ellos serán profesionales sanitarios. No obstante, ha aplaudido la labor del laboratorio de virología por la eficacia y rapidez con la que está resolviendo las pruebas, que ya han superado el millar.

Pablo Fernández ha ganado protagonismo en la crisis. Precisamente, el consejo de Gobierno ha delegado en su figura competencias para que pueda seguir adoptando las decisiones necesarias sin tener que pasarlas por este organismo. La intención es que gane en agilidad y que pueda trabajar «al ritmo que marcan los acontecimientos», ha señalado Barbón.