Asturias: una sanidad pública robusta pero con muchas consultas privadas

ASTURIAS

Hospitalización del HUCA
Hospitalización del HUCA J. L. Cereijido | EFE

La comunidad aparece como una en las que más ha crecido la privatización del sector aunque se mantiene entre la de mayor apuesta por el sistema público

10 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Asturias se mantiene como una de las comunidades autónomas con menor grado de privatización sanitaria, en el que el sistema público es más predominante que en otros territorios y, sin embargo, se ha destacado como una de las autonomías en las que más ha avanzado la privatización en los últimos años. Así lo asegura el informe Privatización Sanitaria de las CCAA 2020 elaborado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) que ha tomado en consideración diversas variables en sus estudio, como el gasto en seguros privados per cápita, el porcentaje de población cubierto por mutualidades de funcionarios, el gasto sanitario dedicado a la contratación de centros privados o las consultas privadas anuales por cada 1.000 habitantes; siendo este el factor en el que el Principado tiene una media más alta que la nacional. 

Tomando como referencia los últimos datos disponibles, los correspondientes a los años 2018 y 2019, Asturias aparece a la cola de las comunidades más privatizadas pero si a comienzos de la década, en 2014, ocupaba el cuarto lugar de territorios más publicos (sólo superada por Extremadura, Castilla-La Mancha y La Rioja), en los más recientes ha pasado a ser la octava.

Los datos concretos de Asturias, según este informe, revelan que el porcentaje de población cubierta por mutualidades de funcionarios en la comunidad es de 3,7% más bajo que la media nacional (5,7%) y lejos de las tasas que casi lo doblan en Castilla y León o Aragón. En lo que atañe al gasto en seguros privados per capita, en Asturias la cifra es de 108 euros por año, también por debajo de la media española (146) y muy lejos de comunidades en las que es gasto es mucho más amplio como Madrid (392), Baleares (267) o Cataluña (245).

El porcentaje de camas privadas sobre el total de las sanitarias en los hospitales de la comunidad llega en Asturias al 26,7%, todavía por debajo de la media (27,38%) pero por apenas unas décimas. Destaca de forma singular el caso de Cataluña donde las camas privadas con más que las públicas, hasta un 56,9%. En la variable que mide el porcentaje del equipamiento de alta tecnología en hospitales privados sobre el total de la comunidad, Asturias llega al 35%, en la media nacional.

Respecto al porcentaje del gasto sanitario dedicado a contratación con centros privados, el informe señala que en Asturias llega al 6,2%, por debajo de la media del conjunto del país (que llega al 7,23%) y que es especialmente alto en Madrid (el 10%) y en los archipiélagos (Baleares y Canarias, ambas con un 9%).

Por último, respecto al número de consultas anuales a especialistas del sector sanitario privado por cada 1000 habitantes, Asturias aparece en una posición elevada, con 625,57, por encima de la media nacional (465) pero lejos de las de Baleares (1.166), Madrid (1.034) o Cataluña (952).

De este modo, la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública  sitúa al Principado como «una comunidad con un grado intermedio de privatización»; con una puntuación de 16; siendo la más privatizada Madrid con 28 y la que menos Extremadura, con 11. En este sentido, informe indica que «los movimientos más llamativos en cuanto a mayor privatización entre 2019 y 2020 son: Andalucía aumenta 7 puestos, y Asturias 4, Castilla la Mancha y Navarra 3, La Rioja y Galicia 2.  Por otro lado mejoran Castilla y León (6 puestos)  Valencia (2)». 

Y también destaca que «se ha producido un aumento de la privatización, en la provisión y en la financiación de nuestro sistema sanitario en general, especialmente importante a partir de 2009 (se ha pasado del 24,6% del gasto sanitario total en este año al 29,5% en 2018, según los datos de la OCDE) y también se han incrementado los conciertos, el aseguramiento  privado y el gasto de bolsillo» en el conjunto del país.

En sus conclusiones el informe apunta además que existe «una gran desigualdad» entre las comunidades a la hora de medir estos parámetros y que «en la privatización de los servicios sanitarios, hay diferencias excesivas que suponen una falta de cohesión del Sistema Nacional de Salud». Además critica la falta de transparencia de los gobiernos autonómicos a la hora de ofrecer de manera pública estos datos y resalta que «los datos son anteriores a la pandemia covid19, y que durante la misma, la situación ha empeorado notablemente en algunas de las CCAA como Madrid o Cataluña».