Pescado de Confianza: un referente nacional y europeo por su calidad

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ASTURIAS

Varios pescadores descargan bocarte en la Rula de Avilés (foto de archivo)
Varios pescadores descargan bocarte en la Rula de Avilés (foto de archivo) J.L. Cereijido

La marca promovida por la Nueva Rula de Avilés es el primer operador vinculado al sector pesquero que se suma a «Alimentos del Paraíso»

16 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La marca de calidad Pescado de Confianza, promovida por la Nueva Rula de Avilés, ya está integrada al sello de garantía Alimentos del Paraíso. De esta manera, se trata del primer operador vinculado al sector pesquero que se suma al distintivo de garantía impulsado por el Principado, que permite identificar y singularizar producciones de la comunidad. La Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial, a través de las direcciones generales de Pesca Marítima y Desarrollo Rural y Agroalimentación, ha impulsado esta distinción, que contribuye a poner en valor el pescado desembarcado en la lonja de Avilés y, a su vez, ayuda al consumidor final a conocer su procedencia.

Esta etiqueta pionera en España, Pescado de Confianza, certifica que todo el proceso productivo es respetuoso no solo con el medioambiente y el ecosistema marino sino también con el cliente. Cualquier persona puede conocer el proceso de tránsito del pescado desde su llegada al puerto hasta su salida para el consumo y puede asistir en vivo a la subasta del pescado, donde se garantiza un estricto manejo higiénico. Además, también se asegura este estricto manejo higiénico en todos los procesos.

Actualmente el pescado subastado en la Rula de Avilés se comercializa en más de cien pescaderías de toda España y el 90% de las mismas se sitúan en el Principado. Para que esos productos puedan ser vendidos en la lonja asturiana se exige un alto grado de seguridad alimentaria, así como de sostenibilidad pesquera y responsabilidad social, lo que hace que el pescado subastado sea «de confianza».

El sistema de gestión de venta de productos pesqueros instalado en la Nueva Rula de Avilés se ha convertido en un referente nacional y europeo por su «calidad y eficiencia energética». El pescado es tratado con el máximo rigor para mantener sus propiedades ya desde su manipulación en cubierta. Además, en el momento que un producto entra en la lonja, este es recepcionado, clasificado y sus características principales parametrizadas. De esta forma, el cliente dispone de toda la información necesaria para optar a su compra.

La higiene y la seguridad alimentaria es primordial en todo el proceso comercial. El alimento se protege frente a la contaminación ambiental, ya que hay un estricto control en la cadena de frío. Además, al disponer de modernas cintas transportadores evitan el contacto con el suelo. También llevan a cabo una continua inspección por si hay presencia de parásitos. Además, una vez adquirido el producto, este es etiquetado y enviado a la sala de recogida para su entrega al cliente. Todo ello se realiza sin tocar, manipular, ni alterar sus propiedades originales, ya que la subasta se realiza a través de dispositivos móviles personalizados.

Asimismo, la propia empresa concesionaria ha implementado tecnología a bordo que permite mantener el pescado en unas adecuadas condiciones higiénicas, así como conocer la disponibilidad del producto en tiempo real. Esto, a su vez facilita la gestión de los residuos pesqueros para su correcto reciclaje a través del punto limpio autorizado. Para ello, se encargan también de recoger las vísceras generadas en las embarcaciones. «Somos cadena de custodia de productos MSC procedentes de pesquerías sostenibles, y contribuimos al mantenimiento de los ecosistemas marinos participando en programas de control de poblaciones de cetáceos», explican. Al mismo tiempo, evitan que haya un desperdicio alimentario, ya que todos los excesos se donan a entidades solidarias.

Todo ello es gracias a la preparación de los tripulantes, que cuentan con el certificado de manipulación de productos pesqueros, así como una amplia experiencia en el sector, lo que hace que ya se lleven a cabo buenas prácticas de pesca desde el inicio de la producción. Además, la Nueva Rula de Avilés proporciona a sus empleados medidas para la mejora de la salud y el bienestar como, por ejemplo, la elaboración de dietas saludables y las instalaciones de aseos, entre otros. Por tanto, hay una importante responsabilidad social corporativa que se deja ver en todo el proceso comercial y que, al fin y al cabo, otorga esa calidad al pescado asturiano.

La marca de calidad Alimentos del Paraíso distingue en el mercado productos agroalimentarios que reúnen determinadas condiciones y cumplen unos requisitos específicos, que van desde la materia prima y el proceso de elaboración hasta el resultado final, de manera que garanticen su origen geográfico y su calidad certificada. Abarca tanto productos frescos como elaborados que superen los controles exigidos por la Administración autonómica. Ahora, la rula de Avilés y sus pescados se hacen también abanderados del «Paraíso».