Violeta Monreal: «Hay que considerar a la Tierra como un ser vivo»

Esther Rodríguez
Esther Rodríguez REDACCIÓN

ASTURIAS

Violeta Monreal con su nuevo libro «Hierba en los polos»
Violeta Monreal con su nuevo libro «Hierba en los polos»

La ilustradora ovetense acaba de lanzar su nueva colección «Guardianes de la Tierra» con la que pretende concienciar a los más pequeños sobre el cuidado del medioambiente

25 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El cambio climático ya es una realidad. Educar en valores a los más pequeños puede ayudar a que en un futuro el problema no vaya a más. Para ello, la escritora e ilustradora asturiana, Violeta Monreal, ha lanzado una nueva colección de libros, Guardianes de la Tierra (Everest), comprometida con el medioambiente y destinada a un público infantil. «Lo que intento es que los críos se den cuenta de que van a heredar la tierra y ahí la responsabilidad es suya. Somos uno más, no somos los dueños de ella. Por eso tienen que aprender a cuidarla y considerarla como un ser vivo, para que así los que vienen detrás la disfruten en mejores condiciones», afirma Monreal.

Por ahora, la autora ovetense ha publicado cuatro libros de la serie, ya que en total la componen ocho: El mar enfermo, El último bosque, Hierba en los polos y Las flores tienen sed, con los que explica la importancia de cuidar el ecosistema. «Los personajes de estos relatos son guardianes diminutos y tranquilos que están entre nosotros. Vigilan y cuidan de la Tierra para que nada malo le suceda y no sabemos que existen. Pero, cuando descubren que es atacada, se enfadan muchísimo y evolucionan a otros seres más temibles para dar una lección a las personas: respetar el planeta», explica. Con cada uno de ellos, trata de tocar «un poco» los temas que «son fundamentales en la educación y concienciación de los niños» porque en un futuro los más pequeños serán los encargados de tomar decisiones y, por tanto, «tienen que saber que pueden cambiar muchas cosas».

Portadas de los libros de la nueva colección de Violeta Monreal
Portadas de los libros de la nueva colección de Violeta Monreal

A través de estas obras trata de demostrar que todo lo que se hace, por muy pequeño que sea, tiene una repercusión. «Siempre pongo de ejemplo Hierba en los polos. El personaje, que vive en el polo, tiene mucho dinero y recursos y como quiere que nadie pase frío, con toda la buena intención, hace una gran calefacción. Parece muy buena idea, pero los polos se empiezan a derretir», detalla. También con El Último bosque resalta la importancia de estos: «es el que nos da oxígeno y el que hace que la capa protectora de la tierra sea fuerte», reconoce la autora

Pero, la ovetense no solo desea inculcar unos valores a través de sus libros, sino que, también, quiere que los pequeños lectores se diviertan. «Un niño no puede aburrirse leyendo un libro. Tiene que gustarle e importarle, sino que se busque otro. Para eso hay un abanico tan grande de lecturas», afirma y reconoce estar «encanta» con sus últimos proyectos. «Madres del mundo también fue un regalo. Es un libro que escribí pensando en qué me gustaría leer a mí. En esta ocasión, no reparé mucho en los niños sino en esas cosas que le suelen suceder a los más pequeños (se enfadan, no entienden las cosas, desean triunfar, etc.) y cómo yo daría respuesta a esos problemas», explica.

Actualmente, Monreal ya está trabajando en la siguiente colección en la que a través de «unos perritos, con los que los niños sienten empatía, hablo de cosas muchos más seria como puede ser el maltrato, el bullying o, incluso la muerte», asegura. Al mismo tiempo, en su cabeza ya modela una serie de cuentos que «hagan crecer en seguridad a las niñas, que puedan expresarse y atreverse a decir lo que piensan. Tendrán ellas todo el protagonismo», adelanta y recalca en la importancia de educar en igualdad desde las edades más tempranas, «fundamentalmente en los niños».