Las tres principales organizaciones agrarias advierten del auge de campañas promocionales de productos de primera necesidad, como pollo, leche huevos y aceite, que pasan factura al campo
17 mar 2021 . Actualizado a las 14:06 h.La guerra de precios de los supermercados puede acabar pasando factura al sector agrario. Así al menos lo consideran las tres principales organizaciones agrarias -ASAJA, COAG y UPA- que reclamaron a los diferentes grupos políticos con representación en el Congreso de los Diputados, medidas contundentes para acabar con estas prácticas. Sus demandas fueron planteadas durante la ronda de contactos celebrada durante las últimas semanas en el marco de la tramitación del proyecto de ley para reformar la ley de la cadena.
Argumentan estas tres formaciones que, ante la pérdida de poder adquisitivo por la pandemia en millones de hogares, las ofertas promocionales de productos de primera necesidad, como pollo, leche, huevos y aceite, han ganado peso en las estrategias comerciales. Las organizaciones temen que, tal y como ya sucedió en otras crisis económicas, la batalla por arañar puntos en la cuota de mercado acabe siendo financiada por el sector agrario. «Resulta intolerable que el esfuerzo de agricultores y ganaderos se utilice para atraer consumidores a los puntos de venta, destruyendo el tejido productivo y abocando a la mayoría del sector a producir a pérdidas», argumentan estas organizaciones,
Sostienen, además, que los ganaderos avícolas y de vacuno de leche ya han experimentado esa presión a la baja durante el proceso de renovación de los nuevos contratos. Entre los productores de leche, por ejemplo, los precios en origen se han reducido entre 2 y 3 céntimos por cada litro, mientras que el resto de eslabones de la cadena mantienen la rentabilidad en sus márgenes. En el sector avícola, por su parte, las organizaciones denuncian que varias cadenas han lanzado ofertas al consumidor mientras que los productores afrontan una subida de costes continuada recibiendo precios un 5,5 % inferiores en lo que va de año respecto a las cifras del año pasado.
Ante esta situación, COAG, ASAJA y UPA, han trasladado su preocupación a todos los partidos políticos. Varias de las enmiendas planteadas en su conjunto han sido contempladas por los grupos y ahora se sigue trabajando para ampliar la aceptación de los principales reivindicaciones del sector agrario. Tanto en las comparecencias públicas, como en las reuniones, las organizaciones agrarias insistieron en la necesidad de prohibir la venta a pérdidas en el último eslabón, de crear un registro de contratos, incluir en el ámbito de aplicación de la ley a los productos importados de países terceros, así como al canal Horeca, reforzar la figura del mediador y generar índices de precios y costes que sirvan de referencia objetiva y pública. Es ahora, según las organizaciones agrarias, cuando se debe avanzar en la dirección correcta con la inclusión de estas enmiendas en la ley y consolidar el cambio de paradigma introducido a raíz de las históricas movilizaciones del sector en febrero y marzo del pasado año.