Hacer un buen uso de este servicio hospitalario es fundamental para evitar su colapso
15 abr 2021 . Actualizado a las 10:49 h.Evitar colapsar Urgencias de un hospital es fundamental y más en estos tiempos de pandemia. Sin embargo, hay ciertas dudas sobre cuándo se debe de utilizar este servicio. ¿Qué dolencias implican acudir por propia voluntad o cuándo se puede esperar? La enfermera Andrea Velasco, trabajadora de esta área, considera que es «subjetivo», puesto que hay síntomas que al principio no parecen de gravedad pero que llevan consigo un problema serio. Aún así resalta que sí hay situaciones en las que no se puede aguardar tiempo y se debe de hacer uso de esta asistencia inmediatamente.
En primer lugar, resalta que se debe de acudir a Urgencias si hay algo que no pueda esperar, es decir, que «es imposible perder el tiempo en pasar primero por el Centro de Salud, no con cita sino también por urgencia, ya que ahí el médico decide si se deriva a una persona al hospital para expensas de más valoración o no». Un ejemplo de ello sería un ataque o un dolor fuerte repentino.
Además, si el dolor es persistente en cualquier parte del cuerpo y va acompañado de complicaciones como pueden ser las respiratorias se debe de acudir a Urgencias. En esa misma línea, la sanitaria resalta que «si se lleva más de una semana con el mismo dolor en una zona concreta es más recomendable acudir primero al médico de cabecera», puesto que la atención en el hospital será más lenta.
Asimismo, añade que si se padece cualquier tiempo de enfermedad crónica y sus síntomas se agravan hay que acudir a Urgencias, ya que puede derivar en complicaciones mayores. También se debe utilizar este servicio si hay una pérdida de conocimiento o si se observan otros signos preocupantes como pueden ser dificultad al hablar, adormecimiento, debilidad o problemas de movilidad.
Otro de los motivos en los que se hace un uso responsable de Urgencias es cuando hay accidentes con fractura o traumatismos. «Concretamente, en estos casos, te acaba derivando el médico de cabecera» señala y añade que «en ocasiones una rotura o un golpe puede no tener un carácter urgente, pero más que nada se viene aquí para poder descartar algo más con una placa». «Si hubiese servicio de rayos en atención primaria no haría falta y muchas veces se podría evitar acudir al hospital», reconoce.
Por último, Velasco detalla que, en cualquier caso, «antes de entrar en Urgencias, se realiza el triaje. Por tanto, una enfermera va a tener que realizar una valoración del paciente y en función de su gravedad le asignará un color. Si es muy grave, obviamente, se le dará prioridad». De esta manera, se asegura un correcto funcionamiento del servicio, ya que se proporcionarán los cuidados en función de lo que se padece, se reduce la saturación y los tiempos de espera.