«Es inasumible organizar una fiesta de prau con el protocolo que se ha establecido»

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

El Carmín de La Pola 2019
El Carmín de La Pola 2019

El sector del espectáculo manifiesta que la cultura de verbenas existente en Asturias es incompatible con las normas establecidas por el Principado.  «Preferimos seguir parados que andar con estas pantomimas», señala el delegado regional de la asociación ACOPLE

12 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El Principado publicaba el pasado viernes el Protocolo de Medidas Generales de Protección frente al covid-19 en la organización de eventos y actividades multitudinarias, celebraciones populares, desfiles o espectáculos itinerantes, documento que en teoría permite que se lleven a cabo las tradicionales fiestas de prau que se organizan en Asturias. Sin embargo, en la práctica, el sector del espectáculo considera que es imposible organizar un festejo popular tal y como los entendemos en la región cumpliendo todo lo que dice el protocolo. En definitiva, «es inasumible organizar una fiesta de prau con el protocolo que se ha establecido», manifiesta Ricardo Barbón Trapiella, delegado regional de ACOPLE (Asociación Española de Agencias y Profesionales del Espectáculo), una vez analizado y contratado el documento.

Barbón Trapiella basa su valoración en la propia cultura de verbena, en lo que se entiende en la región por fiesta de prau, «que es un lugar con barra, carpa, donde vas a pasar el día, a comer, a beber, a bailar y a cantar. Y todo eso, según el protocolo, está prohibido porque la gente tendría que estar sentada, y en un ambiente festivo, la gente no va a estar en sillas como si estuvieran en clase», explica con rotundidad el representante de ACOPLE. Gerente también de la empresa Chapó Eventos añade que tanto para las asociaciones de festejos como para las empresas privadas «es inviable económicamente gestionar un evento» porque recuerda que más del 80% de cualquier festejo se financia con lo que genera la barra que se suele instalar en las fiestas.

Ricardo Barbón Trapiella señala que el problema está en que «estas medidas se importan del resto de comunidades autónomas, pero sus fiestas no son como las de Asturias». Según traslada, en pueblos como pueden ser los de León «las fiestas patronales consisten en una misa, la gente come en casa de familiares, las orquestas actúan en la tarde-noche y después la gente se va a los bares. En esos casos, el presupuesto sale del Ayuntamiento», comenta el representante del sector del espectáculo, que plantea que esas fiestas distan mucho de la cultura de verbena que hay en comunidades como Asturias o la vecina Galicia, en las que la gente sale a pasar el día.

«Lo que estamos viendo es que a nivel político quieren justificar que todo el mundo puede tener actividad y hacer cosas, pero es mentira, porque a ver qué ayuntamiento te autoriza a organizar una fiesta así», comenta Ricardo Barbón, que tiene en cuenta que una fiesta puede generar que se acumule gente en el exterior del recinto perimetrado y que ningún organizador puede hacerse cargo de lo que pase fuera. «Yo puedo intentar cumplir todas las normas, pero de lo que pase alrededor del recinto que establezca, yo no soy responsable y, por tanto, no me pueden encargar de la limpieza o de los altercados de alrededor», apunta el delegado de ACOPLE. «En un espacio abierto no se pueden poner puertas al campo», traslada el mismo, que apostilla que «preferimos seguir parados que andar con estas pantomimas».

Además, tiene en cuenta que los seguros obligatorios que deben contratar las organizaciones de eventos «sólo nos cubren si cumples absolutamente todo, y con este protocolo es imposible de cumplir». Poniendo un símil, Ricardo Barbón Trapiella dice que anunciar que se permiten las fiestas de prau y no permitir bailar, comer, beber o fumar «es como decir: te vamos a tirar al mar y no te vas a mojar. Es imposible organizar algo sin hacer todo lo que se hace en ese evento. Fiesta significa desinhibirte y no estar encorsetado y, en estas condiciones, no nos podemos arriesgar». Por tanto, a su entender, lo que se está haciendo es «utilizar juegos de titulares y engañar a la gente». Así, concluye que el titular que se debería poner en los medios de comunicación tendría que ser: «así no serán las fiestas de prau en Asturias».