Piscinas fluviales en Asturias que no te puedes perder este verano

Nel Oliveira
Nel Oliveira REDACCIÓN

ASTURIAS

Olla de San Vicente

Estas son algunas recomendaciones para terminar las vacaciones a remojo, pero lejos de la arena de la playa

28 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El calor y el buen tiempo de la recta final del verano en Asturias es la excusa perfecta para terminar las vacaciones a remojo. El Principado cuenta con un sinfín de rincones maravillosos para ello, entre ellos los más alejados de la arena de playa. Desde piscinas naturales hasta ríos donde es apto el baño, incluso cascadas con encanto permiten refrescarte mientras disfrutas del idílico paisaje. Además, en ocasiones, para acceder a estos lugares hay que realizar una pequeña ruta por lo que se puede convertir en el plan perfecto. Estas son algunas recomendaciones.

El Cherón de Kiko (Aller)

Playa fluvial de Aller
Playa fluvial de Aller Facebook Cherón de Quico

Situada en la localidad allerana de Llanos, a tan solo 40 minutos de Oviedo y 20 del Puerto de San Isidro. Perfectamente señalizada y hecha en el mismo río, esta playa fluvial más conocida como El Cherón de Kiko es ideal no solo para zambullirte en sus aguas cristalinas sino para disfrutar de una tarde de verano en familia. Cuenta con una extensa área recreativa con barbacoas y una zona de juegos para los más pequeños de la casa.

La Presa (Cangas del Narcea)

Piscina fluvial La Presa de Cangas del Narcea
Piscina fluvial La Presa de Cangas del Narcea fuentesdelnarcea.org

La Presa de Cangas del Narcea es un paraje del que pueden disfrutar todos los asturianos gracias al esmero de una asociación de cangueses. En la antigüedad canalizaba el agua para mover un molino que generaba electricidad en la región, pero con el paso de los años quedó obsoleto y el lugar estuvo abandonado. La Asociación de Amigos del Narcea propuso su rehabilitación con una gran obra en la que el prado que la rodea pasó a ser un terreno verde para tomar el sol los días veraniegos y la presa volvió a recibir agua para que los más pequeños pudieran bañarse sin los peligros propios del cauce de los ríos.

Playa fluvial Aballe (Parres)

Playa fluvial de Aballe
Playa fluvial de Aballe Turismo de Asturias

En Aballe, uno de los pueblos con más encanto de la ribera del Sella, existe una playa fluvial cerca de la iglesia. Además, este Pueblo Ejemplar de Parres, catalogado así en 2013, permite que los turistas conozcan la esencia de una aldea asturiana. También pueden apreciar la variedad de ganado y cruzar el río de un lado a otro a través de una pasarela colgante. Se trata de un entorno natural único a tan solo media hora del Parque Nacional de Picos de Europa.

Cascada de Cioyo (Castropol)

Cascada del Cioyo en Castropol
Cascada del Cioyo en Castropol Turismo de Asturias

En el interior del concejo marinero de Castropol hay una misteriosa ruta que comienza en las antiguas escuelas situadas entre Piantón y Vilarín y que te adentra en un frondoso bosque autóctono. Después de recorrer casi tres kilómetros con un desnivel de 160 metros, toca descender por una pendiente para llegar al río donde se encuentra uno de los lugares más mágicos de Asturias. Se trata de la cascada de Cioyo, un salto del agua de 30 metros de altura que a sus pies rebosa el agua cristalina.

Olla de San Vicente (Cangas de Onís y Amieva)

Olla de San Vicente, en Amieva
Olla de San Vicente, en Amieva

Entre Cangas de Onís y Amieva se encuentra una pequeña y sencilla ruta, apta para niños y adultos, cuyo sendero termina en una poza natural: la Olla de San Vicente. Se trata de un agradable paseo al lado del río Dobra, que no se prolongará más de 45 minutos, para disfrutar de sus cascadas y rápidos hasta llegar a una poza de aguas dulces y cristalinas en un entorno que hará pensar que se encuentra dentro de una historia propia de la mitología asturiana. Zambullirse en esas aguas claras pondrá la guinda a esta excursión.

Cascadas de Oneta (Villayón)

Cascadas de Oneta
Cascadas de Oneta Turismo de Asturias

Situadas en una ruta de frondosa vegetación, estas tres cascadas destacan en el occidente por su belleza natural. Desde el pueblo de Oneta en un corto paseo en el que se puede disfrutar de la flora de la región, se llega hasta la primera de ellas, donde el río y el paso del tiempo han excavado una roca que llega al alto precipicio por donde cae con fuerza el agua a unos veinte metros de altura. Después de sumergirse en su pequeña laguna, continuando la senda se puede observar un antiguo molino que está cercano a la segunda y terceras cascadas, más recogidas pero de igual encanto.

Ría de Niembro (Llanes)

Ria de Niembro en Llanes
Ria de Niembro en Llanes Turismo de Asturias

La ría de Niembro, en Llanes, es uno de esos lugares mágicos que ofrece el Principado. Este romántico paraje es perfecto para darse un chapuzón, sobre todo al atardecer, cuando las aguas reflejan la iglesia y el cementerio que se ven al fondo. Además, este enclave cambia en función de las potentes mareas que llegan del Cantábrico. Si el cauce está lleno se convierte en una especie de lago, pero si la marea está baja se puede disfrutar del arenal que transmite un remanso de paz

Cascada de Morlongo (Villanueva de Oscos)

Cascada de Morlongo
Cascada de Morlongo José López Niño

En plena Reserva de la Biosfera del Río Eo, Oscos y Terras De Burón se encuentra la Cascada de Morlongo, uno de los saltos de agua más bonitos de Asturias y accesible por un breve paseo sin ninguna dificultad. Es un espacio natural ideal para disfrutar de un día de recreo junto al río en soledad. Es poco frecuente encontrarte con grandes cantidades de turistas, como mucho algunas familias que acuden al territorio astur en verano para disfrutar de las temperaturas más frescas.