Por qué en Asturias cada vez hay más nidos vacíos de velutinas

Elena G. Bandera
E. G. Bandera REDACCION

ASTURIAS

MARCOS MÍGUEZ

«Es importante fijarse en si está activo o no antes de notificar su avistamiento», explican en el centro de control de la plaga

18 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay dos momentos a lo largo del año en los que los avisos por avistamientos de nidos de avispa asiática, o Vespa velutina, se incrementan de manera considerable en Asturias. Uno de ellos tiene en lugar en agosto, coincidiendo con la afluencia de visitantes en las zonas rurales de la comunidad, y el otro justo ahora, cuando empiezan a caer las hojas de los árboles y quedan a la vista todos los nidos que están situados en los árboles. Nidos que suponen el 62% de los avisos que se gestionan desde el Centro de Control de Plagas y Especies Invasoras de La Mata, en Grado, en donde advierten de que una buena parte, sobre todo aquellos que están más visibles al verse incluso desde la carretera, están vacíos de velutinas porque su existencia ya había sido notificada con anterioridad y ya se ha actuado sobre ellos para eliminar la plaga.

«Es importante fijarse en que el nido esté activo antes de notificar su avistamiento y, para ello, basta con observar si tiene un tránsito continuo de avispas entrando y saliendo. Simplemente», recuerda Eloy Álvarez Ron, coordinador del centro de control de La Mata, en donde ya se han gestionado en lo que va de año casi 6.000 expedientes relacionados con los avistamientos de nidos de velutina. De ellos, varios cientos estaban inactivos.

«Antes eliminábamos muchos nidos con explosivos, con lo cual nadie los volvía a notificar, pero cada vez se están afinando más los métodos de exterminación, que son más sostenibles en cuanto a la cantidad de insecticida que se aplica y son más eficientes en cuanto a rendimiento. La colonia queda inactiva, ya no hay avispas pero el nido no se destruye. El contenedor se queda ahí y, aunque las avispas ya no podrían volver a recuperar el nido, su presencia sigue generando alarma y reiteración de llamadas», explica Álvarez Ron.

¿Qué hacer cuándo se avista un nido de velutina?

De ahí que desde este centro se insista en que las personas que comunican avistamientos de nidos de velutina se fijen en que realmente estén activos. «Ahora mismo hay un buen número de nidos en el territorio en los que solo ves el contenedor, ya no tienen avispas, por eso también es importante que nos envíen fotografías y que nos afinen la geolocalización, que son los dos datos fundamentales que necesitamos para que los equipos de exterminación vayan a tiro fijo», indica.

Personal del Centro de Control de Plagas y Especies Invasoras de La Mata, en Grado
Personal del Centro de Control de Plagas y Especies Invasoras de La Mata, en Grado

También recuerda que, cuando se avista un nido de velutina, una vez que se ha comprobado que no está vacío, son varios canales por los que se puede comunicar su existencia: a través de la web o de la aplicación de AvisAp, por Whatsapp en el número 610 255 111, en el correo electrónico info@avisap.es o en el buzón de voz del número 984 249 165. Si se trata de una emergencia, en el 112. «Todavía hay muchas personas que, por inercia, llaman al 112 cuando no es una emergencia, pero cada vez son más las que hacen uso de AvisAp, donde se pueden introducir fotos y se puede marcar el lugar exacto donde está el nido sobre mapas o fotos aéreas», explica el coordinador del centro de control de La Mata.

De hecho, de los más de 8.000 expedientes de avistamientos que se abrían en 2020 en el centro para la exterminación de nidos de avispa asiática, más de la mitad se comunicaron a través de AvisAp, en la que este año se mejoraba la interfaz de la web y se creaba una aplicación específica que, una vez descargada en el móvil, permite comunicar la presencia de un nido de forma sencilla e intuitiva. Dos años antes, seis de cada 10 avisos se realizaban al 112 mientras que el año pasado ya se había bajado al 23%, aunque «aún siguen siendo muchos» teniendo en cuenta que en la mayoría de los casos no se tratan de emergencias.

Álvarez Ron recuerda que las velutinas solo atacan en defensa del nido. «Los nidos solo generan problemas si los perturbas y si están en alto es prácticamente imposible perturbarlos». La mayoría se encuentran en árboles, el 28% en edificaciones y solo un 7% en el suelo: «Los que están en el terreno son los más peligrosos lógicamente porque puedes chocar accidentalmente contra ellos. Los incidentes más comunes son de personas que están desbrozando y, con el ruido de la máquina, no se dan cuenta del zumbido de las avispas».

¿Cuáles son los métodos de exterminación empleados?

En el centro de La Mata, una vez que reciben un aviso, se comprueba que no haya errores o duplicidades -«a veces nos llegan avisos que no son de velutina, incluso de nidos de pájaros»- y, cuando ya se tienen todos los datos precisos y los permisos para llegar hasta los nidos, se clasifican en cuatro niveles de prioridad en función de la peligrosidad que tienen para las personas y del perjuicio económico que pueden causar «para saber dónde actuar primero».

En Asturias son varios los equipos de exterminación de nidos de velutina, dependiendo de las localizaciones. Los bomberos actúan dentro de las zonas urbanas y en los casos de emergencia. El resto de situaciones son competencia de la Consejería de Medio Rural, que actúa a través de una empresa pública, o de los propios ayuntamientos, que cada vez tienen más operativos a través de Protección Civil, asociaciones especializadas, contratas o servicios municipales. En la actualidad, ya son 19 los ayuntamientos asturianos que cuentan con equipos de intervención propios.

Ya sobre el terreno, son tres los principales métodos de exterminación que se están empleando en la actualidad en Asturias. En dos de ellos, se aplica insecticida precisamente sin provocar la destrucción del nido. En una de ellas, el insecticida se inyecta en el interior del nido mediante pértigas modulares que se van ensamblando hasta llegar a la altura en la que está situado. En ocasiones se ha llegado a actuar sobre nidos a 30 metros de altura.

Una segunda manera de aplicar insecticida en el interior del nido, más eficiente que la anterior, es mediante proyectiles que lo llevan incorporado y se disparan con escopetas de pinball o carabinas de perdigones. «El insecticida es la forma de exterminación más utilizada y, dentro de los dos métodos, el proyectado tiene como ventajas frente al inyectado una drástica reducción de la cantidad de insecticida que liberas en el medio y una reducción de costes por el mayor rendimiento que tienen los equipos de exterminación», explica Álvarez Ron.

Un tercer método son las detonaciones mediante explosiones, en la que sí se destruye el nido y que se emplea en aquellos casos en los que por alguna razón no puede aplicarse insecticida o en donde los nidos son muy visibles y provocan demasiadas reiteraciones.