Salomé Álvarez, matrona del HUCA: «Estamos en una sociedad que ve el parto como un sufrimiento»

Dámaris Fernández Ponce REDACCIÓN

ASTURIAS

Salomé Álvarez, matrona del HUCA
Salomé Álvarez, matrona del HUCA

Álvarez es la directora de la Federación de asociaciones de matronas de España

30 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Salomé Álvarez es matrona en el Hospital Universitario Central de Asturias desde 2010 y, actualmente, es la directora de la Federación de asociaciones de matronas de España. Anteriormente, también fue directora en la Asociación profesional de matronas de Asturias

- ¿Cómo fue el proceso de elección de la presidencia de la Federación de Asociaciones de Matronas de España?

Yo presenté la candidatura cuando se abrió el plazo y la verdad que fue un poco sorpresa haberlo conseguido porque en mi candidatura, la cual lidero yo, somos todos representantes de asociaciones que son pequeñas y teníamos un poco de miedo que no nos apoyara la gente porque no éramos Cataluña o Madrid, asociaciones que habían liderado previamente.

- ¿Qué trabajo le conlleva este cargo?

La Federación se encarga de la coordinación de las dieciséis asociaciones miembros que tenemos ahora mismo. Tenemos la representación a nivel institucional pero también a nivel de la administración central, que es un nivel más amplio del que estaba acostumbrada.

Al final hay muchos proyectos y tienes que coger las riendas. Luego aparte dar soporte al resto de las asociaciones, organizando todos los temas del día y a día y viendo cuáles son los prioritarios y cuáles podemos dejar un poco de lado de momento. Estamos todavía aterrizando.

- ¿Y qué pasará con el cargo de directora de APROMAP?

Lo he tenido que dejar, hemos cambiado la junta directiva la semana pasada. Aunque en realidad, hace dos años que tendríamos que haber renovado la Junta pero no se presentó nadie, luego llegó el covid y ahora pues ha llegado el momento porque las dos presidencias son demasiado trabajo. Porque no deja de ser trabajo que hacemos en nuestro tiempo libre. Luego, por otro lado, cada uno tiene su trabajo y su vida.

- Entonces sí prosigue con tu trabajo de matrona en el HUCA

Sí, por supuesto

- ¿Cuál es su motivación a seguir con la presidencia y su trabajo de matrona?

Yo reconozco que me gusta mucho mi profesión, tengo la suerte de trabajar en una profesión que me encanta, pero es una profesión que todavía tiene mucho que ofrecer. Todas las matronas decimos lo mismo: soy una persona que siempre pensé que para conseguir algo hay que trabajar por ello y que de nada sirve estar en nuestros puestos de trabajo diciendo todo lo que podríamos hacer pero no hacemos.

Para ello es necesario que existan asociaciones y la Federación estatal para tener un poco de peso a nivel nacional, dado que somos una profesión en la que somos muy pocas, igual es un 3% de la enfermería y pertenecemos al Colegio oficial de enfermería. Si no tenemos una sociedad científica que nos de peso ante el resto de la sociedad, de profesionales y de la Administración pues no vamos a conseguir lograr nada. Entonces la motivación es esa, el pensar que como profesión todavía podemos aportar mucho en la salud sexual y reproductiva.

- ¿Por qué cree que sois tan sólo un 3%?

Porque la matrona se delegó siempre a la atención en los paritorios, hasta hace unos años solo, no estábamos más que en los paritorios y al final no había tantas porque no eran necesarias. Por ejemplo, en Asturias, hay muchos centros de salud que no disponen de matrona, se junta la consulta de matrona de periférico en uno central porque se entiende que sólo podemos ver embarazo. Pero realmente necesitaríamos que, a nivel nacional, multiplicar por 5 el número de matronas actual, para empezar a dar una asistencia un poco más completa.

- ¿A qué otras ramas aparte del embarazo se refiere?

Somos las enfermeras especialistas en el cuidado de la salud sexual y reproductiva de la mujer desde la adolescencia hasta la menopausia, al final de su ciclo reproductivo.

Tenemos competencias en anticoncepción, en educación sexual, en prevención de cáncer de cérvix y de mama, en educación sanitaria, en el embarazo, en el cuidado del recién nacido y en la atención de la menopausia, que también me parece un campo que está un poco abandonado.

- ¿Qué diferencias notorias existe entonces entre su profesión y la de un ginecólogo?

Nosotras nos dedicamos desde el nivel del cuidado, de la fisiología y el profesional médico es el encargado de la patología, entonces, nosotras desde un ámbito mucho más fisiológico, además de ser las encargadas del embarazo y parto de bajo riesgo. Porque en cuanto el parto ya no es de bajo riesgo y se complica, es cuando trabajamos en colaboración con los ginecólogos.

- ¿Y cómo diste el paso para ser matrona?

Yo empecé en Arriondas de enfermera, en el que estuve ocho años y luego me presenté al EIR, enfermero interno residente, aunque estaba un poco dudosa porque por aquella también trabajaba en la unidad de cuidados intensivos que también me gustaba mucho. Al final saqué la plaza para hacer la especialidad, me fui a Tenerife a hacerla y desde que acabé, volví y comencé en el HUCA, en el que llevo trabajando desde 2010.

- ¿Cuáles son los principales consejos que da a una madre primeriza en el momento del parto?

Sobre todo el intentar apartar los miedos, el estar tranquila y que intenten disfrutar de ese momento, porque al final partos en la vida de la mujer son muy pocos, a lo mejor es el único que va a tener y al final es una experiencia muy bonita.

Tenemos una concepción cultural del parto asociada al sufrimiento, el dolor, el pasarlo mal y yo siempre digo que es verdad que va a doler pero va a ser por una buena causa y merece la pena, que en la medida de lo posible, lo disfrutes e intentes recordarlo como una experiencia bonita, aunque a veces no se logra y quedan malos recuerdos.

Yo creo que culturalmente estamos en una sociedad que ve el parto como sufrimiento, que a mí es algo que me llama la atención, porque las connotaciones de esa palabra son muy feas. Creo que un parto es un momento que duele, pero es un momento muy bonito y único en la vida de una mujer.

- ¿Qué cree que podríamos hacer para que el parto no se relacionara con el dolor y el sufrimiento como dice?

Es un cambio cultural, es muy difícil porque es un cambio a nivel de la sociedad, pero si miramos otros países vecinos, no lo ven de esta manera. Aquí, en los años 60 vivimos una época en la que se medicalizó excesivamente el parto y quizás eso fue lo que hizo que hoy en día se considere una patología y el parto no es eso, es algo fisiológico que ocurre en un centro hospitalario. Son los hospitales los encargados de mejorar las resultados perinatales. Pero desde hace años estamos viviendo el proceso de desmedicalización del parto, ósea, lo primero que hicimos fue medicar el parto, pero ahora lo estamos quitando porque los resultados son mejores.

- Durante la pandemia, fueron muchos los cambios que se hicieron, sobre todo en el hospital, ¿cómo se vivió en los paritorios?

Con muchísimo miedo, sobre todo al principio porque ninguno sabíamos lo que teníamos entre manos y lo que se nos venía encima. Las mamás las primeras que tenían miedo, aunque sí es cierto que en ese sentido las embarazadas fue una población que se cuidó muchísimo y la incidencia de contagios en ellas fue muy baja. La verdad es que se portaron muy bien, pero había mucho miedo, llegaban al hospital, no sabían cómo iba a ser, si iban a estar acompañadas… Y la mayoría de las veces nosotros tampoco les podíamos decir lo que iba a pasar, las normas cambiaban de un minuto para otro.

Las matronas, a nivel nacional, luchamos mucho porque no se separara a la madre del bebé, incluso si la madre estaba contagiada, también luchamos porque estuviera un acompañante con ella siempre que se pudiera.

- Pero si la madre estaba contagiada de covid, ¿cómo podía estar en contacto con su bebé?

Se permitía que la madre infectada de covid pudiera estar con el bebé porque apenas había riesgo de transmisión y los beneficios eran mucho mayores: el contacto piel con piel y el inicio de la lactancia maternal, superan con mucho el riesgo que pudiera haber.

Además, la mayoría de las embarazadas que hemos visto contagiadas, eran asintomáticas, se descubría porque en el hospital se hacía la PCR. Pero ya en mayo de 2020, el Ministerio en sus recomendaciones sobre la atención al parto en casos de covid decía que era mejor no separar a las madres de los bebés, mantener medidas de aislamiento aéreo con mascarilla y permitir, en medida de lo posible, la presencia del acompañante que ella eligiese, teniendo en cuenta el sitio del centro médico, dado que en muchos casos, no se podía permitir por falta de espacio. Por ejemplo, aquí en Oviedo, sí pudimos permitírnoslo porque tenemos un hospital relativamente nuevo con habitaciones individuales que nos lo permitieron, pero por ejemplo, en Cabueñes se vieron mucho más limitados.

- Actualmente, ¿se ha podido volver a la normalidad en los paritorios?

Sí, en nuestra área que es obstetricia, en general sí. Los hospitales están retomando la actividad normal con algunas pautas, obviamente la mascarilla es obligatoria y se siguen limitando las visitas que yo creo que no es mala idea, porque si estás en el hospital es porque no estás viviendo tu mejor momento y a veces no nos damos cuenta. Pero por lo general se puede decir que estamos en época precovid ya.

- ¿Por qué piensa que es mejor limitar las visitas en los casos de los embarazos?

Porque se está creando una nueva familia, se está estableciendo un vínculo y lo importante ahí es que la mama, el acompañante y el bebé formen esa unión. Ya habrá tiempo cuando se vayan a casa de recibir visitas.

- Me gustaría acabar con algún recuerdo suyo, una pequeña anécdota que haya tenido en algún parto que le marcara y nos pudiese contar

Yo creo que los momentos más bonitos que he vivido han sido los partos de gente cercana a mí, quitando ya mi propio parto. Pero, por ejemplo, fue muy bonito el momento cuando nació mi sobrino, estar yo y ser yo quien asistiese el parto, fue un momento muy emotivo. Yo reconozco que me gusta mucho mi profesión y es el día de hoy que me emociono con muchos partos.