La paz y la justicia, decisivas en las deliberaciones del Premio Princesa de Cooperación

La Voz REDACCIÓN

ASTURIAS

El jurado del Premio Princesa de Asturias de Cooperación posa para una foto de familia antes del inicio de las liberaciones en torno a las treinta candidaturas de catorce nacionalidades que optan al galardón, este miércoles, en el Hotel Reconquista de Oviedo
El jurado del Premio Princesa de Asturias de Cooperación posa para una foto de familia antes del inicio de las liberaciones en torno a las treinta candidaturas de catorce nacionalidades que optan al galardón, este miércoles, en el Hotel Reconquista de Oviedo Eloy Alonso | EFE

Treinta candidaturas de catorce nacionalidades optan al sexto galardón de la XLII edición de los premios

08 jun 2022 . Actualizado a las 14:44 h.

Las organizaciones y personalidades que trabajan a favor de la paz y la justicia, de la ayuda al desarrollo o que luchan contra las desigualdades y la pobreza en un momento en el que la guerra se ha instalado en las puertas de la Unión Europea se encuentran en el foco de la candidaturas que optan al Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional, que se falla mañana en Oviedo.

Treinta candidaturas de catorce nacionalidades optan a este galardón, destinado a distinguir la labor de desarrollo y fomento de la salud pública, de universalidad de la educación, de la protección y defensa del medio ambiente y del avance económico, cultural y social de los pueblos.

Aunque no ha trascendido ninguna de ellas, varios miembros del jurado que mañana dará a conocer el nombre del ganador de esta edición han coincidido en señalar que la paz, la justicia y la seguridad son cuestiones a tener en cuenta durante las deliberaciones.

Para el politólogo, filósofo y experto en movimientos migratorios Sami Naïr, lo ideal sería premiar a una organización internacional «que actúe seriamente a favor de la paz y de la justicia», si bien ha advertido de que no hay ninguna que cuente con un consenso universal y que esté libre de implicaciones políticas, porque incluso la ONU funciona de manera «bastante discutible, a veces».

En un «mundo caótico en el que prima fundamentalmente la relación de fuerza» y en el que crece la injusticia y la desigualdad en todos los sentidos, tanto entre naciones como entre personas, Naïr ha incidido en que la situación actual «es muy peligrosa» como se ha visto con la invasión de Ucrania y la violación sistemática de los derechos de los pueblos y las personas.

Otra politóloga y jurista que forma parte de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Sophie Muller, ha señalado que «la paz y la seguridad es el tema transversal que preocupa a todos de manera muy potente» en un momento en que la guerra de Ucrania «ocupa y preocupa», con seis millones de refugiados de refugiados desde que estalló el 24 de febrero.

Esta guerra a las puertas de Europa es un problema que llama mucho la atención, si bien Muller ha recordado también que son 100 millones de personas las que hay actualmente desplazadas forzosamente en todo el mundo por culpa de la guerra y las persecuciones.

La vicepresidenta segunda del Congreso, Ana Pastor, ha reconocido que en esta edición «hay candidaturas excepcionales, una vez más, entre instituciones y proyectos para hacer que el mundo sea mejor» y ha incidido en que premios como éste de los Princesa de Asturias deben hacernos reflexionar y estimular a los jóvenes para que vean que merece la pena gastar las energías en proyectos que mejoren la vida de la gente.

En cuanto a la «invasión ilegal y terrible» de Ucrania, Pastor ha señalado que el conflicto está haciendo que todos los ciudadanos, todos los demócratas y toda Europa «hagan todo lo posible para que cese cuanto antes».

La presidenta de la Fundación Cotect y exministra, Cristina Garmendia, se ha mostrado satisfecha de ver cómo las candidaturas presentadas abordan la cooperación internacional desde ámbitos tan distintos como la educación, el medio ambiente o la música a través de proyectos o trayectorias que siempre dejan una huella social muy relevante.

El premio de Cooperación Internacional, sexto en fallarse de los ocho que anualmente concede la Fundación Princesa, recayó el pasado año sobre la ONG Campaign for Female Education (CAMFED) en reconocimiento a su lucha contra la desigualdad y la pobreza y por su trabajo para facilitar el acceso de millones de niñas a la educación y el empoderamiento de mujeres jóvenes en el África subsahariana.

En esta XLII edición se han concedido ya el de las Artes, a la cantaora Carmen Linares y a la bailaora y coreógrafa María Pagés; el de Comunicación y Humanidades, al periodista polaco Adam Michnik; el de Ciencias Sociales, al arqueólogo mexicano Eduardo Matos Moctezuma; el de los Deportes, a la Fundación y el Equipo Olímpico de Refugiados del COI, y el de las Artes, al dramaturgo Juan Mayorga, informa Efe.