Asturias busca fondos azules

B. BLASCO  

ASTURIAS

Banderas de la UE en el Banco Central Europeo
Banderas de la UE en el Banco Central Europeo ANDRE PAIN | EFE

Asturias seguirá recibiendo su parte del plan de recuperación de la UE, del que ya habría recibido dos tercios

05 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El enorme impacto social y económico que tuvo la pandemia de covid en los años 2020 y 2021 fue el motivo por el que la Unión Europea decidió crear un colosal plan de recuperación, en virtud del cual inyectaría 800.000 millones de euros en concepto de subvenciones y créditos a las economías de los países miembros.

De este dinero, una cantidad cercana a los 75.000 millones de euros fue asignado para toda España; por el momento, 605 millones para Asturias. La comunidad ya habría recibido hasta el momento 442 millones para proyectos concretos, pues se trata de subvenciones finalistas, que tienen que ser vinculadas a la presentación previa de propuestas.

Por tanto, según los últimos datos oficiales publicados por el Principado, a Asturias habrían llegado dos tercios de esos fondos europeos procedentes del llamado Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), dentro del marco del plan Next Generation de la Unión Europea, y aún quedarán en 2023 otros 160 millones por asignar.

En cuanto a qué se destina el dinero, desde la administración autonómica insisten en que se realizó un mapa de estrategias en el que se fijaron los sectores hacia los que la comunidad debe «redirigir su modelo productivo»: economía verde y sostenibilidad, salud y longevidad, y cohesión territorial y conectividad. Como elementos transversales, se debía abordar la digitalización y la economía circular.

En realidad, es una premisa que viene como condición sine qua non. Lo que pretendía Europa, por tanto, es aprovechar esta inyección de dinero para modernizar la economía, especialmente en el ámbito empresarial.

El resultado es que los proyectos aprobados son muy variados. Muchos de ellos, tal vez la mayoría, se engloban dentro del apartado energético, como son los relativos al almacenamiento de energía, el hidrógeno verde, la energía renovable o la eficiencia energética. Para esto no hacía falta dar muchas lecciones: el altísimo precio de la energía, que ha ido empeorando a lo largo de este año, ha hecho que todos nos palpemos los bolsillos en busca de formas de ahorrar lo que consumimos o bien abaratar nuestras fuentes.

También hay proyectos sobre movilidad sostenible, la competitividad industrial, la descarbonización, el fomento de la investigación o la digitalización.

Al menos en teoría, los autónomos y pymes también se pueden beneficiar de los fondos, pero existen numerosas quejas sobre la dificultad de acceso, que parece diseñado solo para grandes proyectos o para la propia administración. En este sentido, la red Aceppa de Industria se apoya en el plan de Recuperación para apoyar a emprendedores, pero solo contará con 7,2 millones para ello.

También obligaciones

El próximo año, por ejemplo, los municipios asturianos de más de 50.000 habitantes tendrán que adoptar planes de movilidad urbana sostenible, que incluye crear zonas de bajas emisiones; es decir, limitar el acceso de vehículos contaminantes. Gijón, por ejemplo, ya ha aplicado esos fondos Next Generation para proyectar una zona de bajas emisiones en La Calzada que tiene que estar ejecutada antes de 2024. También Avilés se acogerá a la financiación europea para llevarla a cabo.

El foco de ahorro energético y resiliencia no excluye otras iniciativas más o menos colaterales, por ejemplo, la promoción turística. Recientemente, Cultura anunció que en su presupuesto contará con casi 27 millones para el área de Turismo, con el que se pretende modernizar el sector: planes de rutas de senderismo, la ampliación del Museo de Bellas Artes o campañas promocionales entrarían dentro de este supuesto.