El desagradable suceso al que tuvo que enfrentarse una de las vendedoras del gordo de Navidad

María Sánchez Condado
María S. Condado REDACCIÓN

ASTURIAS

Administración Collainos, en Moreda
Administración Collainos, en Moreda

Al día siguiente del reparto de la Lotería de Navidad se encontró el coche de su marido y el portón de la cochera rotos

11 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El pasado 22 de diciembre, tras la euforia por haber repartido el primer premio de la Lotería de Navidad, una de las vendedoras de la Administración de Lotería Collainos, en Moreda, tuvo que hacer frente a una situación no tan agradable. Al día siguiente, cuando regresó a su casa se encontró el coche de su marido y el portón de la cochera estropeados. Por «coincidencias directas», según la vendedora de lotería, el motivo podría ser que su administración fue la encargada de repartir las papeletas agraciadas con el primer premio de la Lotería de Navidad al Club de Atletismo de Mieres.

El 23 de diciembre al llegar a casa, una de las vendedoras de la administración Collainos se encontró la puerta de su cochera con un fuerte golpe y varios desperfectos en la parte de abajo. Además, el coche de su marido había sido rayado de principio a fin con una llave. Tras lo sucedido, presentaron una denuncia en la que los hechos figuran como un acto de vandalismo. Ahora solo «solo nos queda esperar para saber qué pasa, si el seguro de la comunidad se hace cargo de todo y si no tiraremos del seguro del coche», cuenta la afectada.

Aunque no saben quién fue, creen que podría tratarse de alguien allegado a la familia, que supiera donde vivían. Aunque no tiene claro que el motivo principal sea el reparto del premio de lotería, sí piensa que pudiera ser alguien que les «tenía ganas» o que se dejó llevar por la rabia. Ella misma destaca que solamente han ido a por estos dos objetivos personales y que a la administración de lotería no se han acercado. También insiste en que ni ella ni nadie de la administración ha recibido amenazas directas o insultos y que prefieren no saber quién fue porque «esto es un pueblo y al final nos encontramos todos los días».

Algo que también está dando de qué hablar en estos momentos, comenta una de las vendedoras de la administración, es la cantidad de conflictos que han surgido entre familia y amigos después de que el premio cayese en la zona y que incluso ha visto a familias «medio enfadadas y medio rotas» por ello. Además, una de sus amigas se ha encontrado con una incómoda situación en el trabajo «por no haber vendido las papeletas o por gente que no las encuentra. Ella tampoco tiene apuntado a quién vendió. Siempre le digo que le pueden estar engañando. Hay gente para todo. Es muy probable que la estén metiendo en un compromiso. Mi consejo es que se olvide y quien la tenga que la cobre y quien no que se aguante. Que hagan lo que crean oportuno», explica. Y pone como ejemplo a «aquel que lleva 1.000 euros en el bolsillo y los pierde. Si el dinero no tiene nombre, si te los devuelven bien y si no…».

Desde la administración de lotería de Moreda aseguran que han tenido que hacer frente a «mucha gente que se quiere apuntar al carro. Clientes que dicen que vieron el número y no lo quisieron cuando eso es imposible, porque ese número salió a la venta después de que el Club de Atletismo de Mieres lo liquidara, a partir del 15 de diciembre. Antes de esa fecha nunca estuvo colgado». Y desmienten además que la agraciada que se encontraba en el Teatro Real de Madrid cuando cantaron el número premiado hubiera comprado los décimos en Asturias en verano, pues se pusieron en venta a última hora. «Enviamos algunos decimos a un compañero de Madrid y fue allí donde los adquirió. Por eso se veía nuestro cuño, pero aquí no los compró», aseguran.