El «clan» asturiano pierde la guerra de poder en la cúpula de Unicaja

La Voz

ASTURIAS

31 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

En el proceso que llevó a la transformación de la antigua caja de ahorros de Asturias, Cajastur, primero a un banco, Liberbank, y luego a una fusión con Unicaja, el asturiano Manuel Menéndez logró navegar todos los mares manteniéndose al timón de la entidad hasta su integración actual. Pero quizá ya no pueda estarlo en el futuro.

La mayoría de los accionistas de Unicaja Banco, con la Fundación Bancaria Unicaja a la cabeza, han votado en la junta de este jueves en contra de la ratificación de María Teresa Costa e Isidoro Unda como consejeros independientes, una decisión que resulta clave en la pugna por el control de la entidad.

Con un 'quorum' de asistencia del 86 %, la junta general ordinaria de accionistas de Unicaja Banco, celebrada en Málaga, ha concluido con la aprobación de todos los puntos del orden del día a excepción del quinto, que hacía referencia a la ratificación de estos dos consejeros, a quienes la Fundación Unicaja, principal accionista de la entidad, con el 30,2 % del capital social, no consideraba del todo independientes.

Finalmente el denominado bloque malagueño, representado por la Fundación y otros accionistas como la familia propietaria del grupo textil Mayoral o el empresario Tomás Olivo, próximos al presidente de Unicaja Banco, Manuel Azuaga, ha impuesto su criterio frente al bando asturiano, un «clan» integrado por los consejeros afines al consejero delegado del banco, Manuel Menéndez, y al expresidente de la Fundación Unicaja Braulio Medel.

La no renovación de estos dos vocales independientes es clave, pues afecta a la mayoría del consejo de administración del banco, que está en un momento crucial, al tener que abordar en los próximos meses un traspaso de poder o sucesión por la finalización del período transitorio posterior a su fusión con Liberbank; según informó EFE.