Una rosa para salvar los pueblos

M.Cedrón REDACCIÓN

ASTURIAS

Tras rescatar esta variedad antigua,  el grupo VIOR de la Misión Biológica de Galicia, del CSIC, creó la spin-off Aromas del Narcea para promover entre los agricultores de la zona su cultivo o transformación. Ahora acaba de suscribir un acuerdo con la multinacional del perfume y la cosmética suiza Givaudan para investigar su potencial

24 may 2023 . Actualizado a las 09:39 h.

Cuando hace unos años Carmen Martínez, ahora directora del Grupo VIOR (Vino, Olivo y Rosa) de la Misión Biológica de Galicia del CSIC, acudió a un Congreso Mundial del Vino celebrado en Bulgaria no sabía que el destino le había preparado una sorpresa que la llevaría a ella y a su equipo a emprender una nueva línea de investigación que puede abrir las puertas de la alta perfumería a los agricultores del entorno de Cangas de Narcea, en Asturias. «Era mayo. Después de una de las conferencias _recuerda la investigadora_ salimos a la calle y, de repente, me encontré con un rosal repleto de rosas. El aroma que percibí me recordó a un olor que no percibía desde que era niña. En aquel momento no comenté nada, pero días después hablando con mis compañeros de investigación les hablé de aquel olor tan caraterístico».

El aroma, aunque diferente, le recordó al de una rosa que crecía en el entorno en el que Carmen se había criado, en Asturias. En concreto, a una rosa antigua, anterior a 1832, de la que se conservaban dos plantas en la aldea de Carballo, en Cangas de Narcea. «Lo que pasó fue lo que en ciencia llamamos una serendipia, un hallazgo producto de la casualidad», dice. Porque a raíz de aquello, el grupo comenzó a investigar las rosas en el 2018 y descubrió que aquella variedad de rosa, que bautizaron como Narcea, eran una de las más de cien especies de rosas antiguas que había en Europa antes de 1867, muchas de las que había dibujado el pintor Pierre-Joseph Redouté en su famoso Libro de las Rosas. «Eran rosas de temporada. La Narcea, por ejemplo, solo florece en el mes de mayo. Pero a partir de 1867 comenzaron a llegar desde China variedades que florecían todo el año, pero que además tenían una gama de color mucho más amplia que los rosas, blancos o rojos que dominaban las variedades europeas. Los horticultores comenzaron a cruzarlas. Ahora son las que dominan los jardines, pero no tienen olor. De aquellas más de cien variedades de rosas antiguas que había en Europa apenas quedan», explica la investigadora.

Pero la Narcea, cargada de aceites esenciales y polifenoles, se salvó. Ahora también puede ser la fórmula para salvar los pueblos del entorno de Cangas de Narcea, el lugar que la protegió y la conservó. Porque como miembro del grupo ALCINDER (Alternativas Científicas Interdisciplinarias contra el Despoblamiento Rural), este equipo de investigación quiere convertir la Rosa Narcea en una alternativa agrícola capaz de asentar población en la zona creando riqueza. «La idea es que funcione como las denominaciones de origen, que sea una variedad de rosa ligada a un territorio. En este caso el frío de la montaña es el que le confiere esa máxima calidad. Además el centro de transformación ha de estar cerca para que las flores no se dañen». 

Para lograr ese objetivo el grupo VIOR, que dirige Carmen, creó una spin-off  tecnológica llamada Aromas del Narcea S.L. «Empezamos de cero, pero ahora ya tenemos un plan de negocio, un plan de cómo cultivar esta rosa en espaldera.... ahora tenemos unas 300 plantas, pero tenemos un protocolo de cultivo in vitro que nos permite multiplicarlas hasta las 30.000 o 40.000 para poder suministrar a los agricultores que estén interesados», comenta. Pero además ahora han dado un paso más. Es el acuerdo de colaboración de un año suscrito con la multinacional suiza del perfume Givaudan _ingresa al año más de 6.000 millones de euros_ para estudiar, en exclusividad, las posibilidades de explotación agraria de esta rosa y su posterior procesado para la obtención de perfumes u otros productos cosméticos. Porque no todas las rosas valen para usar en pefumería. «Solo hay tres variedades en el mundo que se usan en perfumería industrial _dice Carmen_ Son la Centifolia, que se cultiva en Grasse (Francia); la Damascena, cultivada en Bulgaria; y la Narcea. Esta última, además, es la única del mundo que está protegida por la Oficina Europea de Variedades Vegetales. Es un proceso largo que nos ha llevado cuatro años, pero logramos esa protección». 

Aromas del Narcea está ahora en plena recolección de flor para continuar con la investigación en colaboración con el grupo suizo. Todo bajo estricta confidencialidad. Y con cariño van recogiendo las rosas que guardan en cestos hechos por un artesano local. La directora de VIOR dice que «son los mejores porque la flor queda ventilada. No podemos usar plásticos porque la flor fermenta. Probamos cajas de madera, pero estos cestos son lo mejor». Quizá por estar hechos con mucho amor.