Chicle de fresa, la asturiana que triunfa en redes con sus más de 500 Barbies y un mundo de color rosa

María Sánchez Condado
María S. Condado REDACCIÓN

ASTURIAS

Cludia López
Cludia López @chicledefresadolls

Claudia López cuenta con figuras de grandes artistas como Cher, Frida Kahlo o la reina Isabel II en su versión fabricada por Mattel.

25 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Claudia López, sus más de 500 Barbies y su estilo de vida rosa triunfan en redes sociales bajo el nombre Chicle de fresa. La joven asturiana que comenzó a coleccionar esta conocida muñeca diseñada por Mattel hace ya diez años confiesa que de pequeña no le gustaban las Barbies. Ahora, sus más de 790 mil seguidores de Tik Tok y sus cerca de 60 mil seguidores de Instagram la acompañan en su gran pasión.

Colección de Babries de Chicle de fresa (Claudia López)
Colección de Babries de Chicle de fresa (Claudia López) @chicledefrsadolls

Claudia López, original de Gijón, empezó su colección hace aproximadamente diez años. Lo hizo «de la manera más tonta. De pequeña nunca me gustó Barbie; tenía cuatro o cinco de cuando era niña, porque me las habían regalado, no porque las pidiese. Un día las vi tiradas en un baúl con toda la ropa mezclada entre ellas. Me decidí a lavarlas, peinarlas, ponerles su ropa original y dejarlas bien. De repente, me di cuenta que eran muy monas y comencé a investigar». Claudia descubrió el gran valor de estas muñecas y el amplio mundo de coleccionismo que había vinculado a ellas. «Buscando Barbies de colección por pura curiosidad encontré una que me encantó: Peter Rabit de 1995. Me la tuve que comprar. Seguí y seguí y a día de hoy cuento con más de 500 Barbies».

Su especial interés por las Barbies relacionadas con el cine y la música ha permitido que grandes celebridades como Escarlata O'hara, Frida Kahlo, Tina Turner, Cher, Legolas e, incluso, la reina Isabel II formen parte de esta impresionante colección. La asturiana confiesa que aún quedan muchas piezas que ansía, como la Barbie Atenas o Barbie medusa, entre otras, de las que aún no ha podido apropiarse debido a su alto coste o su escasez de stock.

Aunque si hay una Barbie a la que Claudia le guarda especial cariño es aquella que su abuela le regaló por su cumpleaños cuando aún vivía en la capital española. Una muñeca que, a pesar de no contar con un gran valor económico, tiene un valor sentimental incalculable. «Mi abuela se molestó en mandármela a Madrid por correo cuando yo comencé a coleccionar. Para mí, era la forma en la que mi familia me decía que aceptaba mi hobby y no me veía como una tarada. Al final, los coleccionistas siempre tenemos el estigma de estar un poco locos». Desde entonces esta Barbie acompaña a López en todos sus viajes. 

Barbie de Chicle de Fresa en Lisboa
Barbie de Chicle de Fresa en Lisboa @chicledefrsadolls

Las más de 500 Barbies se encuentran expuestas en la llamada Doll Room, lo que antiguamente era el salón de la casa de Claudia. «Tenía una pequeña habitación con toda la colección, pero dejó de haber espacio. Fue mi propio novio quien propuso trasladarlas al salón ya que era una estancia de la casa que utilizábamos poco». Y es que los artículos de Claudia no se limitan solo a las Barbies. Funko Pop, discos de vinilo o revistas con portadas significativas también forman parte de este gran tesoro, aunque la asturiana asegura que tendrá que «echar el freno, porque si no, no quedará sitio para más Barbies. De hecho, hace unos días decidí vender gran parte de mi colección de Funkos».

Claudia confiesa además que le gustaría poder, en alguna ocasión, sacar sus muñecas de casa para exponerlas y mostrarlas al mundo. «El año pasado en Metrópoli se realizó una exposición de Barbie, pero por unas cosas u otras no contaron conmigo. Pero sí, me gustaría poder llegar a exponerlas».

Claudia, conocida en internet como Chicle de Fresa, triunfa en las redes sociales y cuenta ya con más de 790 mil seguidores en TikTok y cerca de 60 mil seguidores en Instagram. Todo comenzó hace apenas un año y medio cuando la gijonesa empezó a mostrar su colección a través de estas plataformas. Poco a poco, comenzó a mostrar su personalidad bromista a través de su contenido y «al ver que gustaba me decidí a salir yo, a hacer el payaso e intentar hacer reír a la gente, además, por supuesto, de enseñar mi colección y mi estilo de vida». Un estilo de vida centrado en el color rosa, que le ha proporcionado una forma de diferenciarse del resto de coleccionistas, señala. Su armario se conforma solamente con prendas de este este color o relacionadas con la tematica Barbie. «Mi principal fuente de inspiración fue Bruna Barbie, una influencer brasileña que es una Barbie en sí. La tome un poco como referente y fue una forma de construir mi identidad basada en el lema Solo rosa por todas partes».

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Respuesta a @Barbara Soria mira que bonita 💖

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Además, Claudia confiesa contar con la gran suerte de que su contenido en redes sociales «siempre gusta. La gente quiere ver todo de Chicle de fresa y todo lo que subo funciona». Aunque las redes y Barbie conforman una parte importante de su vida, la asturiana se dedica profesionalmente a la estética en un salón en el que trabaja mano a mano junto a su madre.

Y si hablamos de Barbie no podemos dejar pasar el estreno de la última película de la muñeca. Un largometraje que Claudia ya ha visto tres veces y al cual le da un completo aprobado, aunque es consciente de que «mi criterio no es el más válido. Me emocioné la primera vez que la vi, pero también la tercera y creo que si la viese cuarenta veces, me seguirá emocionando». Además, la gijonesa destaca que no se trata de una película para niños debido a los complejos temas que trata como el feminismo y la igualdad, aunque sí es apta para todos los públicos.