El mercado de invierno del Real Oviedo, a examen

Pablo Fernández OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

Luismi y Rodri celebran el gol al Tenerife
Luismi y Rodri celebran el gol al Tenerife Real Oviedo

Ponemos nota a los futbolistas azules que llegaron en enero al Carlos Tartiere

20 mar 2020 . Actualizado a las 18:28 h.

Casi dos meses de competición son suficientes para, por lo menos, tener una primera valoración sobre un futbolista. Aprovechando el parón causado por la crisis del coronavirus, echamos la vista atrás y ponemos nota a los jugadores llegados en el mercado de invierno al Real Oviedo.

Andriy Lunin. 8,5

El guardameta ucraniano llegó al Carlos Tartiere con un objetivo claro: aportar esa seguridad que la portería azul llevaba adoleciendo durante toda la temporada. Y lo ha cumplido con creces. Lunin, tras dos temporadas sin la regularidad deseada en Primera División, está demostrando en una plaza complicada que su futuro es más que prometedor. Ágil bajo palos, seguro en los centros laterales y una certeza en los golpeos largos, acabar de dominar el juego aéreo y su colocación lejos de la zona de castigo es su gran reto. Girona, Albacete y Rayo fueron testigos de su nivel. 

Simone Grippo. 5,5

El eje de la zaga era uno de los problemas del Real Oviedo y la secretaría técnica de Francesc Arnau se fijó en el central suizo para paliarlo. Llegó el último día del mercado y un proceso gripal le privó de estar presente ante el Albacete. Después, Rozada no acabó de apostar por él en los siguientes dos encuentros. Ya con José Ángel Ziganda en el banquillo, debutó en el Anxo Carro y completó 90 minutos convincentes ante el Lugo. Después, cumplió sanción ante el Tenerife y la buena actuación de su competencia le relegó al banquillo del Francisco de la Hera en Almendralejo. Apuntaba a titular junto a Arribas.

Sebas Coris. 5

El catalán es, con diferencia, al fichaje de invierno que más ha notado la inactividad. Tras más de un año sin disputar un partido liguero, Sebas Coris debutó en Vallecas, con Rozada en el banquillo, como lateral derecho ante la ausencia de Juanjo Nieto. El de Girona cuajó una hora correcta, sin apenas proyectarse en ataque pero sin sufrir en defensa. Dos semanas después, en Lugo, fue titular como extremo. En el Anxo Carro no tuvo su día y, tras un primer tiempo sin apenas relevancia en el juego, fue cambiado al descanso. Sin minutos ante el Tenerife y sin vajar a Almendralejo. 

Luismi Sánchez. 9

El objetivo prioritario de la secretaría técnica ha resultado ser decisivo en la mejoría del Real Oviedo. Arnau buscaba un '6' en el mercado y, según sus declaraciones, Luismi siempre fue la primera opción. Y no está decepcionando. El gaditano llegó, firmó y, desde el primer día, agarró un puesto en el once y no lo volvió a soltar. Completó los 90 minutos de todos los encuentros salvo el de su debut, en Almería. Equilibrio, potencia física, presión, ayudas continuas y, en ciertos momentos, lucidez con balón. Todo eso está aportando el ex del Valladolid. Una de las claves del conjunto azul. 

Rodri Ríos. 8,5

Uno de los fichajes más discutidos pero, sin duda, uno de los más necesarios. El soriano representaba un perfil de delantero que no existía en la plantilla azul y, desde el primer momento, ha demostrado que su llegada fue un acierto. Aporta en el juego, tira continuamente desmarques de apoyo y de ruptura, es un absoluto incordio para los centrales rivales y puede jugar en punta tanto solo como acompañado. Si a todo esto le añades tres goles en seis partidos (ante Rayo, Tenerife y Extremadura) que signficaron cinco puntos, no hay debate. Uno de los grandes éxitos del mercado de invierno del Real Oviedo.