El frío y las constantes lluvias de los últimos días, la gran amenaza para el terreno de juego
03 ene 2021 . Actualizado a las 19:52 h.Un clásico del invierno ovetense. El estado del Carlos Tartiere preocupa. En los últimos días, una ola de frío y lluvia ha asolado el norte de la Península Ibérica. Consigo ha aparecido el hielo y la nieve que ha afectado a Asturias. Condiciones nada beneficiosas para el césped del coliseo azul, propenso a sufrir en esta clase de climatología.
En los últimos años se han ido dando pasos en buena dirección para minimizar los problemas. Se ha replantado en varias ocasiones, se ha añadido nuevas capas de filtrado y se han contratado lámparas para tratar de mimar la hierba al máximo. Los resultados son evidentes, pero insuficientes. El problema sigue ahí.
En los últimos encuentros de 2020, especialmente ante el Tenerife, el verde del Carlos Tartiere empezó a mostrar una imagen preocupante. Su estado no tenía nada que ver con el de pasadas temporadas, pero estaba lejos de encontrarse en perfectas condiciones. Luis García Plaza, entrenador del Mallorca, se refirió a este tema en su rueda de prensa previa al choque: «Del último partido que les vi en la televisión el césped estaba en mal estado, espero que esté mejor. El espectáculo es peor cuando no te encuentras un césped en buen estado. A nosotros como equipo no nos gusta, pero si no está en buen estado nos tendremos que adaptar».
Las incesantes lluvias del fin de semana han obligado a los operarios del club a intensificar los trabajos para mejorar su aspecto, tratando de drenar la mayor cantidad de agua posible. Pese a ello, visualmente el aspecto del terreno de juego dista de ofrecer una imagen apropiada. El césped del Tartiere sigue preocupando.
