Así padeció un multicampeón del Descenso del Sella el coronavirus: «No sé si fui un insensato pero no tuve miedo»

La Voz OVIEDO

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Fiuza (izq.) y Bouzán, ayer tras ganar el Sella.
Fiuza (izq.) y Bouzán, ayer tras ganar el Sella.

El piragúista Walter Bouzán ya se ha incorporado a su trabajo en Oviedo tras haber superado el coronavirus

14 abr 2020 . Actualizado a las 17:58 h.

El piragüista asturiano Walter Bouzán se ha reincorporado a su puesto de bombero en Oviedo ya recuperado tras haber superado el coronavirus, una crisis sanitaria en la que «hay que agarrarse a lo positivo», como son las cifras de curación. El diez veces campeón del Descenso del Sella ha señalado, en declaraciones a Efe, que tras ser diagnosticado por la Covid-19 a mediados del pasado mes vivió la situación «bastante tranquilo», aislado en su domicilio de la localidad de Ribadesella y con síntomas «suaves». En este sentido, ha afirmado que no sabe si por «insensatez» o porque disponía de bastante información sobre la enfermedad no sintió «miedo».

«Pensé: hay que pasarlo», ha manifestado antes de precisar que hubo más preocupación entre los miembros de su familia, especialmente entre sus padres. Según relata Bouzán, durante los días de aislamiento domiciliario le ayudó pensar «en positivo» y fijarse en las estadísticas de curación, aunque reconoce que en ningún momento «le quitó hierro al asunto». Así, y tras superar el coronavirus, se ha reincorporado la semana pasada a su puesto de bombero en la capital de Asturias, donde fue recibido de manera muy especial por sus compañeros con los que estuvo en su cuarentena en permanente contacto. 

Ha reconocido que el confinamiento ha supuesto un abrupto cambio de rutina de sus entrenamientos, que en ocasiones vive con «impotencia» y otras con «desesperación» al tener que cambiar su medio natural, el agua, por un aparato específico para remar en seco desde su casa. «Ha sido un cambio de costumbres y hay que intentar fijar rutinas», aconseja. El piragüista ha asegurado que el nivel de «estrés» y «esfuerzo» que realiza en su faceta deportiva le ha ayudado en su tarea como bombero, una labor que exige una gran preparación física. «Son dos profesiones que podrían ir de la mano», ha recalcado Bouzán.

El palista ha dicho que aún mantiene la esperanza de que el Descenso del Sella pueda celebrarse este verano, si bien ha matizado que aún quedan muchas semanas y la evolución de los acontecimientos determinarán si finalmente se suspende. «En esta situación la veo peligrar», ha señalado en referencia a una prueba en la que no ha participado en las dos últimas ediciones y a la que en esta edición «se la ha pasado por la cabeza» acudir, pero «todo está en el aire, y ahora más». Por otro lado, ha indicado que la decisión de aplazar los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 ha sido «la mejor» entre las posibles. «Es una faena, pero en España no se puede entrenar y habría una desigualdad brutal entre países», ha comentado al respecto, informa EFE.