«Al final XsP funciona como cualquier otro partido, por eso pasamos página»

J. C. G. GIJÓN

GIJÓN

Eduardo Campomanes, coportavoz de Equo Xixón
Eduardo Campomanes, coportavoz de Equo Xixón

Eduardo Campomanes, coportavoz de Equo, explica las razones de la formación para el abandono de la confluencia con Podemos Xixón, con quien no obstante estudia una coalición junto a IU para 2019

11 oct 2018 . Actualizado a las 13:05 h.

«No es una decisión de un mes, de dos o de cinco; es una situación que se ha ido creando a lo largo de tres años y medio, que quisimos reconducir y cambiar durante todo ese tiempo, pero que al final hemos decidido que no es posible reconducir». Eduardo Campomanes, coportavoz de Equo Xixón, resume en esos términos el largo proceso de tensiones y desencuentros internos con una parte de Podemos Xixón que ha llevado, como hoy anunciaba la formación ecologista, a una ruptura que desmembra Xixón Sí Puede, agrupación de electores de la que Equo formaba parte sustancial desde su gestación. Igual que esa decisión de hace tres años y medio, la de «abandonar el barco y pasar página» la han adoptado en consulta telemática unos 50 afiliados y simpatizantes registrados, algunos de los cuales formaban parte de órganos internos y organismos municipales ante los que ya han presentado la renuncia. Campomanes habla de «fracaso» de un modelo que buscaba ser alternativa a los partidos tradicionales y la formación de la que es portavoz pone ahora proa a una coalición de corte más «clásico» con Podemos e IU para las próximas elecciones. Pero con todo bien claro y por escrito por delante.

-La semilla de esta ruptura viene de lejos. ¿Cómo se ha llegado hasta aquí?

-Xixón Sí Puede se presentó a las elecciones de 2015 como una agrupación de electores después de una serie de asambleas y reuniones entre gente de Podemos, de Equo y otros independientes, en las que se decidió concurrir como agrupación de electores. Esa agrupación necesitaba unas reglas de funcionamiento. Pero todo fue muy rápido y no hubo tiempo de tener ese protocolo antes de las elecciones, de modo que en los meses posteriores se estuvo debatiendo y buscando una fórmula para el funcionamiento de la agrupación. Se aprobó un reglamento, pero nunca se llegó a aplicar. En la práctica, las decisiones las tomaban los concejales del grupo municipal de XsP.

-Una crítica similar a la que ha venido formulando el sector 'crítico' de Podemos, derrotado en las recientes primarias.

-Efectivamente. Hubo muchísimo debate y muchísima tensión dentro de XsP porque mucha gente, entre ella la vinculada a Equo, pensábamos que no se podía funcionar así y que no se podían tomar las decisiones de arriba abajo, sino que había que tomarlas de abajo arriba, y por lo tanto debía de haber asambleas y ponerse en marcha ese reglamento que se aprobó en una asamblea; es verdad que no por un 90-10, pero sí formalmente, por lo que se tenía que haber aplicado. Pero solo encontró obstáculos para ello y en la práctica no se llegó a poner en funcionamiento. Eso ha ido generando cada vez más insatisfacción y tensiones. Por nuestra parte siempre estuvimos pidiendo que se pusiera en marcha, y dentro de Podemos también había su pugna en ese aspecto, con un sector que rechazaba que funcionase como un partido clásico y no como lo que era, una agrupación de electores.

-¿Y que ha sucedido en los últimos meses para precipitar esta decisión?

-Podemos tuvo su debate y sus elecciones, y al final ganó el sector más cercano a la mayoría de concejales del grupo municipal. Y la realidad es que desde entonces se agudizó más ese mal funcionamiento por parte del grupo y de un Consejo Ciudadano en el que las decisiones se seguían tomando dejando a Equo a un lado, sin consultarnos ni debatir nada con nosotros. Todo esto con independencia, y quisiera matizarlo, de lo que es el programa electoral. No estamos diciendo que el programa electoral estuviese siendo ignorado o se estuviesen tomando decisiones contrarias a él.

-Cuestión de método más que de contenidos.

-Exactamente. Para nosotros es muy importante no solo los objetivos a alcanzar, sino también los medios para ello. No solo el fondo sino también la forma. Todo eso ha ido conduciendo a una desafección muy grande por parte de la gente que inicialmente apoyaba este proyecto. Pasamos de asambleas de XsP de doscientas o trescientas personas a asambleas de cien o menos. La gente, como veía que no se le daban los métodos de participación, se iba cansando y yendo a sus casas, renunciando a participar. Todo eso lo hemos ido exponiendo en distintas reuniones con el grupo municipal, incluso con Podemos, pero la cosa ha seguido así, y nos hemos visto abocados a tomar la decisión de dejar de apoyar esa candidatura, a XsP.

-Sus representantes en varios organismos ya han presentado su dimisión. ¿Dónde tenían presencia?

-El hecho de que no se haya aplicado este reglamento no significa que hubiese una actividad interna y una participación en distintas entidades. Es importante señalar que XsP no era una coalición entre dos partidos políticos -Podemos y Equo- sino otra cosa diferente. Podemos y Equo apoyaban esa agrupación pero era la gente personalmente la que participaba en ella, no los partidas. En su momento hubo una serie de convocatorias para estos puestos municipales, con algunas personas de Equo en esos puestos. Al dejar de apoyar esta candidatura, lo lógico y razonable es que esas personas presenten su dimisión. Tenemos representación, y hablo un poco de memoria, en Emtusa, en la Fundación de Servicio Sociales, en el Patronato Deportivo Municipal y en organismos como el consejo de Residuos, consejos escolares… Seis o siete personas que representan a XsP en estos organismos.

-¿Y ahora? ¿Cómo afronta Equo 2019?

-Eso es importante. Lo que suceda no va a tener mucho que ver con todo esto que hemos vivido en los últimos tres años y medio. Hemos visto que la fórmula de una agrupación de electores o de una confluencia de bases no ha sido posible y no queremos reeditar nada parecido en principio con las mismas personas con las que hemos visto que no se podía funcionar; sería absurdo. Como sabes, hace unos meses se firmó a nivel estatal un preacuerdo político entre Podemos, IU y Equo que no es vinculante para municipios y comunidades, y nosotros, en Gijón en concreto, vamos a valorarlo y a hablar con IU para ver si es posible un entendimiento para poder presentar, en este caso, una coalición de los tres partidos para las próximas municipales.

-Confluyente, pero con una fórmula más 'de partido'.

-Más clásica, si quieres, en la cual cada formación tiene su independencia y en la que habría que aprobar previamente un protocolo de coalición en el que se pusieran todas las reglas de funcionamiento, y no al contrario como sucedió en XsP. Con una negociación previa y las cosas claras sobre el funcionamiento y el programa. Ya sabes que hay algunos problemas, que a una parte de IU le gustaría esa fórmula y a otra que no… Hace unos días Podemos Gijón ya nos invitó a buscar acuerdos, se nos ha remitido una carta oficialmente invitándonos a ello y estamos dispuestos, como siempre, a tratar de llegar a cualquier confluencia entre organizaciones más o menos cercanas en ciertas cosas para conseguir en Gijón una mayoría de lo que llamamos ´fuerzas del cambio', quitar el gobierno de Foro y hacer otro tipo de políticas. Siempre somos favorables a ello, pero el tiempo dirá si somos capaces de plasmarlo en algo o no.

 -¿Alguna reflexión política de fondo sobre esta experiencia? ¿Se sienten desengañados de algún modo después de este ensayo, frustrado para ustedes, de fórmulas alternativas?

-Este tipo de fórmulas que dejan a un lado los partidos políticos, o en las que los partidos apoyan pero con un paso atrás para que sea la ciudadanía la que se organice en candidaturas municipalistas, ha tenido éxito y funcionado muy bien en algunos lugares de España y en otros, Gijón entre ellos, ha sido un fracaso. Aquí no ha funcionado. No hemos sido capaces de construir ese espacio más horizontal y de bases que queríamos hacer. Habrá que explorar otras fórmulas distintas. No obstante, ha habido cosas positivas y negativas. Nos hemos puesto en contacto personas de distintas organizaciones que hemos sido capaces de hacer cosas y debatir en cierto aspecto, pero se ha demostrado también que el funcionamiento clásico de los partidos políticos está muy presente; al final XsP funcionaba como puede funcionar cualquier otro grupo municipal: el grupo decide y, si acaso, hay alguna decisión casi ya adoptada sobre la que se pide opinión a las bases. No es lo que nos gusta y por eso abandonamos ese barco y pasamos página. Pero tampoco es que hayamos llegado a la conclusión de que con estas personas no queremos saber nada. No hay que perder de vista que dentro de Podemos hay mucha gente que sigue apostando por el modelo que nosotros defendemos, y esa gente esta ahí en Podemos y es posible ir tratando de llevar todo este proyecto a término. Vamos a ver si en estos meses que faltan somos capaces de llegar a acuerdos interesantes.