Así disfruta de su libertad el caballo rescatado cuando era maltratado en plena calle en Gijón

E. G. GIJON

GIJÓN

«Ahora este esclavo conoce la libertad y que no todo son palos», dicen en la ONG Mundo Vivo, que se ha hecho cargo de su custodia cautelar hasta que el caso se resuelva en los juzgados y pueda ser adoptado

17 dic 2018 . Actualizado a las 12:57 h.

Dicen que al principio era muy arisco «por la vida de maltrato que ha tenido«, pero se ve que está disfrutando de una nueva vida en libertad. «Ahora vive libre y feliz con todo tipo de atenciones», dicen en la ONG Mundo Vivo, que se hacía cargo este fin de semana de un caballo que fue requisado por la Policía Local de Gijón cuando estaba siendo maltratado en plena vía pública y tiraba de un carro con más de 2.000 kilos de peso. «Al no poder con dicho trabajo, estaba recibiendo tremendos fustigazos», indica Luis Bernardo, de Mundo Vivo.

El animal, cuya custodia cautelar hasta que se resuelva el caso en los juzgados está en manos de la ONG, ha sido acogido por una familia que le está dando una vida a la que no estaba acostumbrado. De hecho, en un vídeo colgado ayer en las redes sociales, se puede ver cómo se deja querer e incluso come de la mano de quienes le cuidan. Ese mismo día, por  la mañana, seguía estando arisco e incluso se ponía a dos patas a la defensiva.

«Este es el resultado de lo que, en pocos días y con mucha paciencia, consiguen el amor y el cariño. Nuestro chico empieza a ver la bondad del ser humano. Ahora este esclavo conoce la libertad y que no todo son palos», dice Bernardo.

«Una vez que el caso quede resuelto en los juzgados y esperemos que el fallo sea a favor de este inocente, lo sacaremos en adopción», indica Bernardo, que también ha solicitado a través de las redes sociales colaboración por parte de algún experto en comportamiento equino.

Desde la ONG también agradecen el rescate llevado a cabo por la Policía Local de Gijón y su implicación contra el maltrato animal, así como la entrega de la familia que lo ha acogido. La situación de este caballo había sido denunciada hace ya tiempo hasta que finalmente, en vista además de que estaba recibiendo palos en plena calle, se requisó a sus propietarios.