El gijonés acusado de maltratar a su pareja: «Se golpeó con una alcantarilla al caer»

La Voz OVIEDO

GIJÓN

Juzgados de Oviedo
Juzgados de Oviedo

El acusado niega los hechos mientras que la víctima afirma sus agresiones y violación

05 mar 2019 . Actualizado a las 13:53 h.

La supuesta víctima que sufrió maltrato, insultos, amenazas y que fue agredida sexualmente por su pareja, con la que convivía en Gijón, ha relatado entre lágrimas ante el tribunal los «constantes insultos que recibía y como fue agredida sexualmente por el procesado». Por su parte el acusado A. C. A., para el que el Fiscal pide 12 años y 10 meses de cárcel y que ha negado los hechos. «Nada de lo que se ha denunciado es verdad, yo discutía con ella pero no llegamos a las manos», ha dicho.

La víctima, que ha prestado declaración como testigo ya que ha renunciado a ejercer acciones legales sobre su supuesto agresor, ha descrito que los primeros meses la relación fue buena pero pasados unos meses empezaron las «broncas, las agresiones y las faltas de respeto verbales». «En varios ocasiones la frase concreta era o eres mía o no eres de nadie», ha afirmado entre lágrimas la víctima que ha asegurado que insultos como «loca, zorra, puta, cerda» eran habituales. Así ha asegurado que fue antes que nacieran sus hijos --gemelos-- cuando la relación ya era muy mala, pero a raíz del nacimiento de los mismos las discusiones y agresiones «aumentaron». «Empujones, bofetones, me agarraba del cuello», ha relatado entre lágrimas. También ha explicado que a su entonces pareja no le gustó que ella empezase a trabajar en una limpieza de portales, hasta el punto de que un día, el 4 marzo de 2017, cuando llegó a casa del trabajo él le recriminó que llegase tarde y comenzó una discusión a lo largo de la cual le «lanzó una lata de albóndigas y luego intentó darle con una silla y después le dio dos rodillazos y un puñetazo en el costado izquierdo». «Yo tenía que trabajar, necesitaba ese trabajo y no podía coger ninguna baja así que me tomé un paracetamol y ese día no se lo conté a nadie», ha dicho.

Respecto a la supuesta agresión sexual que sufrió la madrugada del 11 al 12 de marzo ha explicado que ella esa noche no quería mantener relaciones porque «le dolía el costado al respirar y además tenía que trabajar al día siguiente desde las cuatro de la mañana» por eso asegura que «le dijo que no quería muchísimas veces, todo el rato, y a grito pelao que le hacía daño». «Incluso después de lo que hizo le dije que no quería, se lo repetí muchas veces desde el principio a gritos pero el no hizo caso así que me agarró de las muñecas y la forzó», ha indicado la víctima que ha manifestado que cree «que la madre del acusado que estaba en la casa la tuvo que oír». Ya al día siguiente ha manifestado que se lo contó a la vecina y esta le dijo que denunciase y no retirase la denuncia. Bien diferente ha sido la declaración del acusado que ha negado todos los hechos que le imputa Fiscalía. Únicamente ha reconocido a preguntas del fiscal que envió todos los WhatsApp recogidos por fiscalía a un grupo en el que también estaba una amiga de la pareja y en los que, entre otros ponía: «Las hostias que te di las merecías y no me puedes llamar maltratador porque tú también me pegaste», otro en el que escribía «si me sigues poniendo de mala leche al final el autocontrol para su puta madre», pero ha asegurado que los mismos se debían a «discusiones por lo que hacía ella que no le parecía normal».

Declaraciones del acusado

Ha relatado que en el momento de los hechos que se juzgan él y la víctima eran pareja y fue a raíz de que les retirasen la custodia del hijo que tenían en común y que después falleció, cuando la relación empeoró. «Cuando nos quitaron los niños teníamos dos meses para recurrir la sentencia de los Servicios Sociales y era ella la que estaba pidiendo los papeles y apartó la documentación mía para pedirlos solo para ella», ha explicado. Respecto a la supuesta agresión sexual el acusado ha explicado que ese día su madre estaba en la casa. Ha indicado que fue su pareja quien le propuso mantener relaciones y no recuerda que le pidiese que parase, por lo que ha asegurado que el sexo fue consentido y en ningún momento opuso resistencia. Respecto a las marcas que la víctima presentaba en muslos y muñecas ha asegurado que las mismas se decían a que a ella le gustaba las relaciones fuertes. «Lo hacíamos así, con muchas y variadas posturas sexuales. Una vez que acabamos nos quedamos en la cama y nos dormimos», ha indicado.

Ha relatado que al día siguiente su entonces pareja subió a casa de la vecina porque esta la llamó, pero con anterioridad recibió a la Policía Local porque por entonces el procesado se encontraba en arresto domiciliario. Preguntado por otro de los partes médicos presentados por la víctima en los que presentaba heridas en un costado, el procesado ha explicado que las mismas se debieron a que ella se golpeó en una caída con una alcantarilla. «Yo quiero que esto se resuelva ya, Llevo seis años con otra pareja y no tuve ningún problema, no entiendo el por qué de esta denuncia y de esta situación», ha dicho el acusado en su derecho a la última palabra.

Declaraciones de los testigos

La madre del acusado ha negado haber escuchado gritos en la noche en la que supuestamente se produjo la agresión sexual. También ha negado que su hijo y su pareja discutiesen con asiduidad. La vecina a la que supuestamente recurrió la víctima para pedir ayuda ha declarado que «ella le dijo que él la había pegado por haber llegado a casa tarde». «Me dijo que la pegaba y que la forzaba en ocasiones», ha explicado esta testigo que ha destacado que «le dije que si lo que me contaba era verdad tenía que llamar a la policía y ella decidió llamar a su amiga». «Oía gritos día sí y día no, pero los dos gritaban siempre», ha insistido.

Esta amiga de la víctima y del acusado ha explicado que la víctima le «contó que su pareja le insultaba pero siempre era dentro de unas discusiones muy grandes que tenía». «Eran palabras de discusión normal, tonta o estúpida, pero eran discusiones constantes, era un maltrato mutuo», ha dicho esta testigo que ha reconocido que la víctima también le contó que el acusado la forzó. «Al principio me dijo que no quería denunciar porque le quería mucho, pero luego ya se decidió y fuimos al hospital», ha relatado esta testigo, que ha calificado a la víctima de «mentirosa». «Era ella a veces la que le buscaba a él, se que ella mentía muchas veces», ha dicho. Tanto los psicólogos, como los médicos peritos que exploraron a la víctima han corroborado ante el Tribunal las marcas que presentaba la víctima en la zona de los muslos y las muñecas --moratones e hinchazón--. La Fiscalía ha considerado acreditados los hechos y ha calificado de «coherente y persistente el relato de la víctima que sufrió maltrato desde el inicio de la relación».

Por ello ha mantenido la petición de pena de doce años y diez meses de prisión por delitos de agresión sexual; violencia sobre la mujer; amenazas; maltrato habitual y vejaciones. Además ha añadido la medida de libertad vigilada durante un periodo de siete años en virtud de la cual debe comunicar al Tribunal cualquier cambio de residencia y que además se le imponga la obligación de participar en programas de educación sexual. La defensa por su parte ha solicitado la libre absolución de su defendido. El juicio ha quedado visto para sentencia.