El diseño del nuevo equipo local se organiza en torno a los concejales Natalia González y José Luis Fernández, con la propia alcaldesa como concejala de Igualdad y la «repetidora» Marina Pineda en tareas de portavocía, en una estructura con 10 de 11 concejales liberados total o parcialmente
17 jun 2019 . Actualizado a las 10:32 h.El nuevo gobierno municipal gijonés, con la socialista Ana González a la cabeza, ya ha echado a andar. Lo ha hecho esta mañana con el rayar mismo del día: a las 7,30, la nueva regidora ha ocupado su despacho y a las 8,00 mantenia la primera reunión con un equipo en el que Natalia González y José Luis Fernández serán los dos grandes puntales de la estructura de gobierno diseñada por la flamante alcaldesa para su prometida «reinvención» de Gijón. En un domingo donde ya tuvo ocasión de ejercer en uno de los frentes que se comprometió a mimar -la calle-, la regidora desveló también el diseño de su ingeniería interna de gestión municipal, en la que también cobra especial protagonismo la única concejala que estuvo en el grupo municipal saliente durante todo el pasado mandato: Marina Pineda, que se ocupará de las tareas de portavocía, además de las de concejala de Hacienda. Todo ello en un equipo de gobierno sujeto a la hipotética y no descartada incorporación del representante de IU, Aurelio Martín, si así se deriva finalmente de las conversaciones que los socialistas y la coalición de izquierdas retomarán de inmediato de cara a un definitivo programa común para el mandato.
Dos núcleos motores
González contempla dos núcleos motores: el vinculado al «Gijón para las personas» que comprometió en su discurso de investidura, relacionado con las políticas sociales y de bienestar, en estrecha conexión con otra idea que recalcó el pasado sábado -la de Gijón como «ciudad educadora»- y con las políticas culturales. Del peso de la educación en el modelo de la alcaldesa, educadora ella misma de profesión y exconsejera del ramo, da idea el hecho de que las políticas de infancia y juventud vayan a ponerse bajo la gestión de la concejalía de Educación y no de Servicios Sociales. Todo ello quedará bajo coordinación de la número tres, la abogada, especialista en cuestiones de Igualdad y exdiputada nacional Natalia González.
El segundo núcleo quedará bajo la supervisión de José Luis Fernández, y conectará las competencias en el hardware político local: economía empleo, fiscalidad, urbanismo y, vinculadas a este, cuestiones de movilidad o de infraestructuras urbanas. Las políticas de igualdad que, como adelantó González, circularán de modo transversal por toda esa estructura, quedarán en manos de la propia alcaldesa, confirmando el peso de este vector en su modelo de ciudad para los próximos años.
El resto del organigrama asigna Educación y Cultura al número 2, Alberto Ferrao; Promoción Económica y Empleo, para Santos Tejón; la estratégica competencia en Medio Ambiente, será para Carmen Saras; Mantenimiento Urbano a Olmo Ron; Participación Ciudadana y Consumo a Salomé Díaz; Deportes y Zona Rural a José Ramón Tuero; Dolores Patón tendrá la encomienda de Distritos y el superconcejal José Luis Fernández también recibe Seguridad Ciudadana. De ellos, tal y como ha confirmado la alcaldesa, diez serán concejales liberados de forma total o parcial, en una corporación con opción hasta a 18 de sus 27 ediles liberados.