Los vehículos más contaminantes pagarán más por aparcar en la zona azul de Gijón

E. G. B. GIJON

GIJÓN

Una de las zonas de la ORA de Gijón
Una de las zonas de la ORA de Gijón

Así es cómo Gijón pretende emular algunas de las medidas de «Madrid Central» para reducir las emisiones contaminantes como obliga Europa

21 sep 2019 . Actualizado a las 09:52 h.

La apuesta es clara: una ciudad libre de coches. O al menos así se imagina Gijón en un futuro no muy lejano la alcaldesa, Ana González, como decía ayer en una entrevista en la cadena Ser en la que se hacía eco del cambio de movilidad que está por venir y de los planes que tiene el equipo de gobierno para que Gijón sea una ciudad más accesible, inclusiva y, sobre todo, habitable. Cambios que se recogen en los casi 200 folios del borrador de la nueva ordenanza de Movilidad que, a finales de mes o principios de octubre, presentará la concejalía que dirige Aurelio Martín, de IU, para abrir un proceso informativo y participativo que, «con un poco de suerte», permitirá que entre en vigor a principios de 2020.

Martín, aprovechando que ayer visitaba la ciudad con motivo de la Semana Europea de la Movilidad la concejala de Más Madrid Inés Sabanés, que impulsó la implantación de la zona de bajas emisiones Madrid Central, avanzó algunas de las medidas que se pretende emular en Gijón para reducir las emisiones contaminantes procedentes del tráfico como obliga la Unión Europea (UE), que ya hace diez años estableció unos valores límite que deberían cumplirse sin excusas en 2020.

También Sabanés recordó la tendencia europea es impulsar que las ciudades de más de 50.000 habitantes tengan zonas de bajas emisiones, «porque producen resultados bastante immediatos en reducción de contaminación y son ejemplares en el sentido de ir trabajando en una concienciación de un nuevo modelo de ciudad que reserve espacio para los peatones, que son los primeros en la pirámide de movilidad».

Dos de esas medidas que se implantarán en Gijón son el uso de distintivos ambientales de la Dirección General de Tráfico (DGT) y, en función de ese registro, establecer que los vehículos más contaminantes paguen más por aparcar en la zona de aparcamiento regulado por la ORA. En Madrid Central, como apuntó Sabanés, los vehículos eléctricos e híbridos con el distintivo ambiental de cero emisiones no pagan.

Otra medida que ya se ha ido avanzando, además de tener en cuenta la perspectiva de género, es la regulación de los patinetes eléctricos en función de su potencia y peso, de manera que solo los que pesan menos de 25 kilogramos y que no circulen a más de 15 kilómetros por hora podrán ser manejados por el carril bici mientras que el resto serán equiparados a motocicletas y ciclomotores, con la consiguiente obligación de circular por la calzada y el uso de casco y seguro.

También se implantarán más zonas con velocidad limitada a 30 kilómetros por hora e incluso a 20 y ya se está realizando un estudio de aparcamientos en superficie y subterráneos, además de que se revisará la red de carriles bici, en parte inconexos, de la ciudad. También la alcaldesa dijo en la Ser que quiere que los barrios también se beneficien de las medidas que se implanten para rebajar las emisiones del tráfico rodado.

«Vamos a hacer las cosas con mucha tranquilidad y con mucho estudio de las zonas, pero sobre todo con mucha paciencia y mucha pedagogía», dijo Martín, que también apuntó que «Madrid y Gijón son ciudades diferentes en muchas cosas, pero nos interesa la filosofía de Madrid Central, además de que en las grandes conglomeraciones de Asturias estamos obligados por la UE a tener un plan del aire, que no es un capricho y por lo tanto tenemos la obligación de rebajar nuestras emisiones».

En todo caso, remarcó que la ordenanza de Movilidad será «garantista» y »participada» con el ánimo de alcanzar el máximo consenso posible. No pasó por alto además por el hecho de que buena parte de la contaminación atmosférica de Gijón tiene un origen industrial. Precisamente ayer desde la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies denunciaban los altos niveles de partículas contaminantes registrados durante la noche anterior, que en el caso de El Lauredal ya suponen 64 superaciones diarias en lo que va de año de PM10, cuando la normativa vigente admite 35. El próximo 26 de septiembre, además, la Plataforma contra la Contaminación de Xixón ha convocado una manifestación para reclamar aire limpio en la ciudad.

«La contaminación industrial es una de nuestras máximas preocupaciones, pero también es bueno que tengamos conciencia de que hay otros elementos que contaminan, entre ellos los vehículos, que en algunas partes de la ciudad suponen el 50% de las partículas contaminantes», dijo Martín, que también recordó que las zonas de bajas emisiones están desde hace una década implantadas en ciudades europeas como Londres, Berlín, Stuttgart o Munich y que otras como Roma, París, Lisboa o Amsterdam han dado pasos en ese sentido en los últimos años.bajar la contaminación.