Hace ya diez años que este local gijonés fue uno de los pioneros en traer la idea de librería café a la ciudad, aunque «al principio la gente no entendía muy bien el concepto»
03 sep 2024 . Actualizado a las 09:32 h.Un buen libro y un buen café son los acompañantes perfectos para disfrutar de una buena tarde. Dos conceptos que se fusionan a la perfección en este café-librería de Gijón. La Revoltosa fue uno de los primeros locales de la ciudad en revolucionar, hace ya diez años, el concepto de librería.
Oriol y Verónica se embarcaron en esta aventura en el 2013. Su amor por la lectura y las cañas les llevó a abrir una de las primeras cafeterías-librerías de la ciudad. Tras varios años viviendo en Madrid, Verónica, que por aquel entonces había acabado sus estudios de psicología y se preparaba para afrontar la prueba del PIR, decidió dar un giro a su vida y regresar a su ciudad de origen, Gijón. En aquella época, Oriol también se dedicaba a opositar mientras era enredador de un equipo de balonmano. Fue entonces cuando ambos decidieron dejar de lado sus trayectorias profesionales y emprender un nuevo camino. Aunque los comienzos fueron complicados, diez años después, ambos continúan al mando de este curioso local.
La Fugitiva o La Marabunta, fueron algunos de los locales madrileños que inspiraron a estos dos jóvenes en sus comienzos. «Empezamos sin tener ni idea, nunca habíamos tenido ni un bar ni una librería», explica Oriol, pero poco a poco todo fue tomando forma. «Empezamos buscando ayuda para encontrar el local que mejor se adaptase y tras una gran reforma, finalmente, en diciembre del 2013, pudimos inaugurar la librería». Aunque no todo iba a ser tan sencillo, a tan solo dos horas de su gran apertura «los libros aún no habían llegado. No queríamos abrir sin libros porque teníamos miedo de que no se entendiese el concepto. Cuando los tuvimos los esparcimos por todas partes como pudimos», recuerda Verónica entre risas.
Abrir la librería no fue la única odisea a la que Verónica y Oriol tuvieron que hacer frente. Hacer entender la dinámica del local también fue complicado. «Al principio, la gente no entendía muy bien el concepto, es más, no entendían nada. Pensaban que era una especie de biblioteca o que teníamos libros de consulta. Nos preguntaban si podían leer los libros, no llegaban a comprender cómo se podía leer libros en un bar. A la gente, en general, le chocaba», explican. Con el paso del tiempo la idea ha ido calando poco a poco en la gente, hasta tal punto que «ahora cuando pasan por delante se creen que es una librería y cuando entran descubren el bar. Es un poco el efecto contrario a lo que pasaba antes», comenta Verónica.
Aunque los inicios de La Revoltosa fueron lentos, la tendencia fue cada vez a mejor, sobre todo, gracias a su exposición en eventos como La Semana Negra o la Feria del Libro, «que nos dieron mucha visibilidad y nos permitieron que la gente nos comenzara a conocer».
«La oferta cultural de la ciudad es amplia»
Aunque la narrativa y el ensayo sean los géneros predominantes en esta librería, su oferta literaria es amplia. La Revoltosa cuenta con libros para todos los gustos y edades, desde política, pasando por la literatura infantil, sin olvidar las obras escritas en lengua asturiana. Además, en todo momento «apostamos por editoriales pequeñas pequeñitas, que hacen las cosas con mucho cuidado, aunque no quita que también tengamos algunos libros de editoriales más grandes como el grupo Planeta».
La Revoltosa no solo aguarda en su interior el concepto de librería. Con el paso de los años, se ha convertido, además, en un entorno de encuentro cultural y de trabajo. «Mucha gente viene para hacer reuniones de trabajo informales e incluso nos llaman preguntando si está libre la parte de arriba para fiestas o eventos organizados. También acuden a nosotros algunas organizaciones o movimientos sociales que por lo que sean no tiene local en ese momento o lo tienen ocupado».
Las actividades culturales son otras de las grandes protagonistas en este local gijonés. Entre ellas, destacan sus dos clubes de lectura, «uno feminista y otro de ensayo». También lo hacen sus talleres de teatro, sus micros abiertos y sus presentaciones de libros. Unas actividades que tienen éxito, gracias en parte, a la propia tendencia cultural de la ciudad.
Gijón se consagra como una de las ciudades españolas con más librerías por habitantes, un factor que favorece la proliferación de este tipo de negocios. «La oferta cultural de la ciudad es amplia y muchas veces gratuita. Hay muchísimas actividades culturales sobre todo en torno a las librerías. A veces, nos tenemos que andar poniendo de acuerdo, porque de repente llega un jueves de noviembre y coinciden varios eventos en distintos locales. Es verdad que todos los días tienes cosas que ver, cosas que hacer y siempre, la inmensa mayoría de las veces, es casi todo gratuito», explica Oriol.
Tras más de diez años desde su apertura, La Revoltosa sigue creciendo y ampliando su oferta literaria y cultural. Ahora Verónica y Oriol, junto a sus nuevos compañeros, se centran en continuar hacia delante con el proyecto.