Faustino Oro, el Messi del ajedrez con tan solo 11 años: «Mi sueño es llegar a ser campeón del mundo»
GIJÓN
El joven ajedrecista participó en una exhibición simultánea celebrada el pasado martes en la Universidad Laboral de Gijón
03 jul 2025 . Actualizado a las 09:30 h.Con tan solo 11 años, Faustino Oro, oriundo de Argentina, se ha convertido en el maestro internacional de ajedrez más joven de la historia. Su destreza, su talento innato y su esfuerzo constante han llevado a este joven a convertirse en el Messi del ajedrez, llegando incluso a vencer a los mejores jugadores del mundo como Magnus Carlsen. El pasado martes, Faustino Oro recaló en la Universidad Laboral de Gijón para mostrar su destreza en una exhibición simultánea organizada por la Federación de ajedrez del Principado de Asturias —FAPA— y la Dirección General de Deportes del Principado.
Como buen argentino, Faustino Oro era un gran enamorado del fútbol. Desde muy pequeño vivió con un balón pegado a los pies, pero la irrupción de la pandemia hizo que su vida tomara un nuevo rumbo. Durante el confinamiento, «jugueteaba mucho en casa con la pelota. Entonces, como desconcentraba un poco a mis padres que trabajaban, mi mamá le dijo a mi papá que me enseñara el ajedrez». Sin saber que este era el comienzo de una nueva leyenda.
Aunque al principio este deporte no llegaba a convencer del todo al pequeño Faustino. «Me parecía aburrido, en la plataforma en la que jugaba arrancas con 800 de Elo —sistema de puntuación que determina el nivel del jugador— y bajé hasta 200 en una semana», recuerda Oro. Gracias a la insistencia de su padre, Faustino continuó jugando al ajedrez y poco a poco comenzó a descubrir las maravillas de este deporte. «Mi padre me dijo que si subía 100 puntos de Elo, me daría un premio. Ahí me empecé a motivar y empecé a subir».
Su pasión por el ajedrez no paraba de aumentar, del mismo modo que lo hacía su puntuación. Con el tiempo Faustino Oro descubrió que el mayor interés de este deporte era «el propio juego. El juego en sí me divierte mucho. Me gusta hacer tácticas», asegura el argentino. Ahora, tan solo cinco años después de su primera partida, Faustino Oro se ha convertido en el maestro internacional de ajedrez más joven de la historia, ganándose así el apodo de El Messi del Ajedrez o el de El pibe de Oro.
Con tan solo 11 años, el maestro ha tenido la oportunidad de enfrentarse con algunos de los mejores jugadores como Magnus Carlsen, ante quien logró imponerse. Además, Faustino confiesa que ante estas importantes partidas, siente «mucha emoción. Cuando les gano me pongo muy contento, me siento muy feliz». Pero el argentino guarda una larga lista de oponentes a quienes le gustaría hacer frente «como a Gukesh Dommaraju, el campeón del mundo, o a Ding Liren, el subcampeón. Quizá con alguno más también, pero esos dos serían el top», confiesa Oro.
Y es que el objetivo final de este pequeño ajedrecista es coronar el podio mundial. «Pero voy paso a paso. Ahora, mi objetivo es convertirme en gran maestro y obtener 2.500 puntos de Elo. Pero mi verdadero sueño es convertirme en campeón del mundo». Una meta por la que Faustino lucha día a día. El joven argentino combina sus más de 6 horas de entrenamiento diario con sus estudios, que cursa en Badalona, ciudad a la que se mudó junto a su familia hace ya más de un año.
Hasta ese momento, Faustino Oro continuará con su gira mundial de exhibiciones y competiciones y es que su última partida se ha disputado aquí, en Gijón. El argentino formó parte de una exhibición simultánea que tuvo lugar el 1 de julio en la Universidad Laboral y que fue organizada por la Federación de ajedrez del Principado de Asturias —FAPA— y la Dirección General de Deportes del Principado. Este torneo contó con la presencia de unos veinticinco jugadores, desde niños y niñas hasta el jugador más veterano, con 84 años. En el torneo gijonés, el argentino consiguió cuatro tablas y 21 victorias.
En su primera vez en el Principado y aunque tan solo ha pasado unas horas en la ciudad, Faustino Oro asegura que Gijón es «muy lindo lugar». Tras su paso por la villa, el argentino pone rumbo a León donde se disputará un torneo magistral. Y, a finales de julio, cogerá el avión para viajar hasta Kazajistán para disputar un nuevo torneo.