De Cádiz a Gijón caminando: el viaje espiritual de un argentino por el corazón de España

María Sánchez Condado
María S. Condado REDACCIÓN

GIJÓN

Martín Catalano durante su peregrinación por Asturias
Martín Catalano durante su peregrinación por Asturias

Martín Catalano peregrinó durante más de un mes sin descanso por toda la península hasta completar más de 1.400 kilómetros a pie

17 jul 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

De punta a punta: más de 1.100 kilómetros que han convertido a Martín Catalano en el «primer argentino en cruzar España a pie», o al menos así lo han bautizado los periódicos de su país natal. No es la primera vez que Catalano aterriza en España para peregrinar por el norte del país, pero esta vez ha regresado para completar aquello que un día soñó. 

 «Todo empezó por un sueño», comienza relatando Martín Catalano. «Desde niño sueño con Francisco de Asís» y hace siete años, en una de sus noches, el santo le trazó una línea horizontal. «Me dijo que la caminara y aunque al principio no entendía a qué se refería, investigando me di cuenta de que Francisco de Asís había realizado el Camino Francés  —hasta Santiago de Compostela—en 1214». Fue en ese momento en que el argentino se dio cuenta de que debía hacer lo mismo. 

Recorridos realizados por Martín Catalano
Recorridos realizados por Martín Catalano

Desde ese momento, la vida de Martín Catalano cambió por completo. «Estos siete años han sido muy abundantes en todos los sentidos», asegura. Pero sus sueños aún le tenían preparada otra peregrinación. En una de sus vueltas a México, país en el que el joven se encontraba trabajando, «tuve el mismo sueño, pero esta vez dibujó un camino vertical». Rápidamente, Catalano se dio cuenta de que se trataba de la vía Augusta, el tramo que comprende de Cádiz a Sevilla; y la ruta de la plata, de Sevilla a Gijón. Y sin dudarlo ni un momento, preparó todas sus cosas para volver a cruzar el gran charco y comenzar su segunda andadura por España. 

El 29 de mayo salió desde Cádiz y el 29 de junio pisó Gijón. Más de 1100 kilómetros caminando llevaron al argentino a un destino del que se encuentra «completamente enamorado». «Ya había tenido la posibilidad de visitar Asturias hace unos años y de conocer Gijón, Ribadesella, Cangas de Onís y los Picos de Europa. Este camino me ha ayudado a terminar de conocer la región yendo por el Camino Primitivo». Y aunque Martín ha tenido la oportunidad de explorar nuevos lugares, asegura que se ha quedado con ganas de «conocer un poco más Gijón» y no duda en decir que volverá. «Asturias tiene muchas cosas por ver, muchas reservas, parques naturales; durante el Camino he ido tomando nota para regresar y profundizar». 

Martín Catalano en su llegada a Gijón
Martín Catalano en su llegada a Gijón

Una travesía de más de mil kilómetros no es tarea sencilla. Por un lado, «tiene una parte física», para la que Martín venía muy bien preparado. «Es algo que me gusta aconsejar: no hacer esto tipo de cosas sin sentirte realmente bien físicamente, el cuerpo es el móvil que te va llevando». Por otro lado, está, asegura, «la parte espiritual. Trabajo mucho la meditación, el andar, solo la lectura. Tuve una preparación más interna que me ayudó a sacar adelante los días. 

En su peregrinación el argentino se ha encontrado además alguna que otra dificultad. Como una gran ola de calor, que Catalano sufrió precisamente entre Cádiz y Sevilla. «Hacía una media de 32 kilómetros al día y caminaba con más de 40 grados durante unas ocho horas. La verdad que fue sofocante».

Además, Martín ha tenido la oportunidad de conocer toda la fauna de la península, pues se ha encontrado con «jabalíes, ciervos, serpientes y todo tipo de perros que se encontraban custodiando los campos». Las noches en la oscuridad tampoco le resultaron una tarea sencilla. «Me he perdido varias veces por no poder ver las señales, pero aquí estoy. En general no tuve  mayores inconvenientes», asegura el argentino. 

Otro de los grandes aspectos que Catalano ha destacado en su paso por Asturias es la amabilidad de la gente. «Todos son muy hospitalarios. También he tenido la oportunidad de conocer muchos peregrinos que venían desde muy lejos. El Camino me ha permitido conocer a muchas personas muy especiales y vivir muchas anécdotas».

Martín Catalano en su llegada a Santiago de Compostela
Martín Catalano en su llegada a Santiago de Compostela

Tras su llegada a la playa de San Lorenzo de Gijón, Martín Catalano decidió continuar su camino hasta Santiago de Compostela, donde terminó su peregrinación el pasado 12 de julio, tras recorrer más de 1.400 kilómetros. Ahora, tras haber cumplido la profecía de su sueño, Martín se embarca en un nuevo recorrido, antes de regresar al continente americano para visitar Fátima y la iglesia de San Francisco de Asís, en la Toscana, aunque eso sí, esta vez, lo hará en avión.