Wenceslao en el Túnel del Tiempo

OPINIÓN

Monte Naranco, Oviedo
Monte Naranco, Oviedo

18 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Había una vez un alcalde al que el viento castañero le perturbó los sentidos y, creyendo que debía pasar a la historia a la altura de su predecesor, se empeñó en hacer una obra que fuese lo más faraónica posible, lo más costosa posible y lo más inútil posible.

Se le ocurrió horadar un túnel para los coches en el que, entre pliegos, proyectos, licitaciones, reformados y obras, estuvo entrampado durante veinte años.

Cuando, por fin, consiguió terminarlo y salió al exterior se encontró a seres extraños que andaban en bicicletas de colores, subían y bajaban de trenes silenciosos o paseaban con ropa deportiva, pero apenas vio más que algunos coches eléctricos circulando de forma calmada entre el arbolado del Bulevar de Santuyano.

Como pasaba por allí Nacho del Páramo, el concejal de urbanismo, le preguntó sobresaltado qué había pasado en la ciudad durante su prolongada ausencia. Nacho le contestó: Nada Wences, que hemos estado llevando a cabo el programa de gobierno que habíamos firmado en 2015 ¿no te acuerdas?