Centenares de personas se congreraron en la plaza de la Escandalera en memoria del joven muerto tras varios golpes en La Florida
22 jun 2019 . Actualizado a las 20:44 h.Vecinos, amigos y familiares fueron llegando al borde de las seis de la tarde a la plaza de la Escandalera, en Oviedo, para exigir justicia para David Carregal, el joven fallecido después de recibir una serie de golpes que resultaron mortales en la madrugada del 11 de junio, en las fiestas de La Florida. El caso, en el que el maestro que ya iba camino a su casa y se cruzó con un grupo de jóvenes que, según los testigos, la emprendió a golpes y le dejó gravemente herido para fallecer días después en el hospital, conmocionó a la ciudad y también a la localidad de Cudillero, de donde era natural. Una bandera del concejo acompañaba la concentración junto a camisetas con lazos negros.
La concentración fue silenciosa en un inicio aunque después, tras un largo aplauso comenzaron los gritos de «¡justicia!» y «¡no es accidente, es asesinato!». A comienzos de esta semana se detuvo a los tres implicados en la muerte del joven profesor, de 33 años, y uno de ellos ingresó en prisión acusado de homicidio doloso mientras los otros dos quedaron en libertad con cargos por omisión del deber de socorro. En las primeras manifestaciones en su recuerdo, el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, calificó de «accidente» el suceso, lo que despertó un gran malestar y que le obligó a enviar un comunicado con aclaraciones señalando que se refería a que se trata de un episodio aislado en una ciudad, como Oviedo, que es segura y lamentaba que se le hubiera podido malinterpretar.
Según la autopsia practicada en el HUCA, David Carragal sufrió dos golpes en la cabeza: uno de ellos, una patada; el otro, en el parietal izquierdo, fue el más grave y es compatible con una caída al suelo. La patada fue recibida en una posición baja e impactó primero en un hombro. Además de estos informes forenses, y según testigos presenciales, Carragal habría tratado de levantarse después de la agresión y sufrido convulsiones que también podrían haber concurrido entre las causas de su fallecimiento.
El pasado miércoles, la juez ordenó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para uno de los tres jóvenes detenidos por la mortal agresión. Se trata de J.C., de 18 años y vecino de Llanes, que admitió ante la magistrada que lanzó una patada a la víctima aunque sin poder precisar si le había alcanzado o en qué parte del cuerpo había impactado. Los otros dos jóvenes arrestados, de 18 y 19 años, amigos del presunto autor de la mortal agresión que le acompañaban aquella madrugada, quedaron en libertad con cargos por omisión del deber de socorro. El jefe superior de Policía de Asturias, Juan Jesús Herranz, ha reconocido la existencia de «discrepancias» entre las versiones de los detenidos y los testigos, y ha pedido la colaboración ciudadana para recabar testimonios adicionales o incluso grabaciones que puedan ayudar a esclarecer totalmente los hechos.
