Una estación centenaria que se queda sin taquilla

D.R.

OVIEDO

El plan de recorte de Renfe-Feve hace que por primera vez en 116 años no haya vendedor en la parada ferroviaria de Trubia

04 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Por primera vez en más de un siglo, no hay nadie que venda billetes en la estación de ferrocarril de Trubia. Desde el pasado 1 de enero, junto con otras siete estaciones asturianas, sus usuarios tendrán que comprarlos bien a través de máquinas expendedoras o bien por internet. Según Renfe-Feve, solo 25 personas por día de media usaban esta estación, de modo que la operaria que atendía ya ha sido trasladada.

Se cierra así una historia de 116 años entre el pueblo y su tren. Corría el año 1904 cuando la estación abría por primera vez. La fábrica de Armas de Trubia necesitaba dar salida a su mercancía y recibir materiales de forma más eficiente. Por ello, a finales del siglo XIX se consideraba que la línea se podía aprovechar tanto para la fábrica como para extraer carbón de las cuencas mineras.

Víctor Chávarri, presidente de Hulleras del Turón, creó el 26 de octubre de 1899 la Sociedad General de Ferrocarriles Vasco-Asturiana, con un capital social de 15 millones de pesetas. Tras presentarse el proyecto, el 15 de julio de 1901, el Gobierno otorgaría la concesión de este ferrocarril por un periodo de 99 años, sin subvención estatal pero declarado de utilidad pública. Por fin, en mayo de 1904 se inauguró el tramo entre Trubia y San Esteban de Pravia con un total de 39 kilómetros; la apertura definitiva de esta línea se produciría en agosto de ese año, a la par que enlace con Oviedo a través de la estación de Fuso de la Reina.

Los ferrocarriles del Vasco-Asturiana están formados por tres líneas fundamentales, que son las de Ujo a Trubia, Oviedo a Ujo y Trubia a San Esteban de Pravia. Más tarde se añade la de Ujo a Collanzo. El trazado del sistema ferroviario sigue la dirección del río Nalón atendiendo las necesidades del transporte de carbón de Mieres y las cuencas de Aller y del Caudal.

Ya a finales del siglo XX, como parte de la operación urbanística Cinturón Verde de Oviedo se decidió desmantelar el tramo Oviedo-Fuso de la Reina y adaptar, como alternativa a ese trazado, la línea Oviedo-Trubia a ancho métrico (estrecho) para su utilización por FEVE. De esta forma, se lograba mantener la conexión entre la línea de la Sociedad General de Ferrocarriles Vasco Asturiana y la línea del Ferrocarril Económico a Santander, discurriendo por la estación común de Renfe y Feve en Oviedo. La transformación a ancho métrico se completa el 4 de febrero de 1999, tras haber sido clausurada la línea de ancho ibérico en 1997.