Baraja proyecta un mini Atlético para su Sporting

Andrés Menéndez

SPORTING 1905

Baraja
Baraja

El técnico rojiblanco ha revolucionado al Sporting con un estilo basado en el sacrificio, orden y esfuerzo

28 mar 2018 . Actualizado a las 02:16 h.

Pipo Baraja ha revolucionado al Sporting. El técnico rojiblanco ha fabricado un equipo con sello propio que conoce, a la perfección, sus virtudes y que tapa, con un cuidado exquisito, las carencias que antes limitaban la lucha por los objetivos. El vallisoletano ha contagiado a la plantilla de un gen ganador, que niega los vicios adquiridos en los primeros meses de competición, y que hace posible el sueño del ascenso, ahora a tan solo dos puntos.

Intensidad, sacrificio, orden y transición

Bien armado desde atrás, el Sporting de Baraja es un equipo coral que impone un ritmo alto de juego, con una presión intensa y ordenada, para después ejecutar al contraataque. El conjunto rojiblanco juega con la seducción: invita al rival al desorden y después, con espacios, te mata. El esfuerzo no se negocia y el primer defensa es siempre el delantero, Santos. La intensidad, bien entendida, y el esfuerzo colectivo, con Santos como primer hombre en la defensa, son fundamentales.

Baraja prefiere dotar al equipo de más rigor y menos libertad. Los intercambios de posición, habituales en otros entrenadores, son esporádicos y las líneas suelen estar perfectamente dibujadas. El inicial 4-4-2 se ha transformado en un 4-2-3-1 donde el doble pivote fuerte es fundamental. El vallisoletano tiene claras las consignas en ataque: recuperación, vértigo, y transición. La obligación de los dos mediocentros es liberar rápido a los extremos. Es fundamental terminar las jugadas. Por establecer una comparación de estilos, la idea de Baraja en el Sporting, resulta similar, con sus matices, a la propuesta de Simeone en el Atleti. 

Bergantiños y Jony

Lo primordial es el grupo. Todos tienen su rol y forman parte activa del funcionamiento del equipo. Con la llegada del mercado invernal, el fondo de armario, la llamada segunda línea, ha ganado peso en el equipo. Jugadores como Guitián, Nano Mesa, Juan Rodríguez o Nacho Méndez se sienten importantes y ofrecen un alto rendimiento. Hay titulares y suplentes pero todos están metidos. Además, el Pipo, se ha liberado de jugadores de menor raza para hacer un grupo con más mordiente.

Dentro del enorme ejercicio colectivo el Sporting del Pipo se entiende alrededor de dos jugadores que marcan el contexto: Álex Bergantiños, la prolongación del técnico en el campo, y Jony, el mejor jugador del equipo. El mediocentro coruñés es el jugador que mejor representa lo que quiere Baraja. Sujeta al equipo y siempre ofrece el pase fácil y vertical. Por su parte, Jony es el líder del equipo y un estímulo para sus compañeros.