El caso Cuenca sigue en activo y la AFE defiende al jugador
03 sep 2018 . Actualizado a las 22:49 h.La principal asociación de futbolistas del fútbol español sigue acumulando bajo su punto de vista nuevos motivos para llamar a la huelga a sus jugadores profesionales. El primero fue debido al pacto entre LaLiga y un empresario extranjero para jugar un partido de competición liguera en Estados Unidos, y el segundo, más reciente, lleva el nombre de Cuenca.
El extremo quiso fichar por el Reus con el contrato mínimo profesional de Segunda División y LaLiga declinó su aprobación:
Aunque no existen declaraciones oficiales, desde la asociación se ha filtrado el último fin de semana de septiembre como posible jornada de huelga en el fútbol español para protestar por el hecho de que sus opiniones no están siendo tenidas en cuenta por LaLiga en decisiones importantes. Esa semana está previsto un Real Sporting de Gijón - Las Palmas el 29 de septiembre a las 18:00.
La respuesta de LaLiga ha sido la siguiente:
«Contrariamente a lo dicho por el CF Reus e Isaac Cuenca, desde LaLiga no se cuestionó que éste hubiera firmado su contrato en las condiciones que afirmaban firmarlas. Lo que LaLiga impidió fue que se incumplieran las condiciones para poder inscribir más jugadores por encima del límite salarial, fichando uno nuevo y dejando fuera a los ya subidos a 'borradores' en la plataforma, que sí cumplían con las condiciones ofrecidas», insistió.
En este sentido, LaLiga muestra su sorpresa por la actitud de la AFE que «en el último día del periodo de fichajes» les presionó «para que autorizara el fichaje de Isaac Cuenca frente a otros jugadores que habían sido contratados con anterioridad con un salario aceptado para su inscripción».
Por otro lado, el organismo recalcó que no «son ciertas las afirmaciones vertidas en algunos medios de comunicación sobre la imposibilidad de jugar en algún equipo por parte» del catalán. «A día de hoy, con la información remitida tanto por el Reus como por el jugador, éste podría estar en disposición de formalizar un nuevo contrato con cualquier equipo español, al tratarse de un jugador en situación legal de desempleo, de acuerdo a los dispuesto por el reglamento general de la RFEF», admitió.
Igualmente, LaLiga se refirió al caso de la cesión infructuosa también de Juan Carlos Carrillo, procedente del Cádiz y sin coste para el Reus, que a cambio había llegado a un acuerdo con el equipo cadista para la venta de Dejan Lekic. «Las normas del Control Económico especifican que, aunque un jugador sea cedido sin coste, su valor sí computa para el cálculo de los límites salarial, por lo queesta cesión no se autorizó. El Reus reclamó ante el Comité de Control Económico y éste le dio la razón a LaLiga», detalló
«Por último, queremos resaltar que LaLiga fue quien exigió por escrito al CF Reus que no disminuyera el salario de los jugadores ya contratados, siendo el CF Reus quien ofreció la posibilidad de reducir el salario a alguno de sus jugadores, y negándose LaLiga expresamente a esta solicitud», sentenció la entidad.
