La Pizarra: Un Sporting de paso lento y tropiezo continuo

D.A.

SPORTING 1905

Djukic
Djukic @GuilleGL73

Artículo de opinión

20 ene 2020 . Actualizado a las 10:04 h.

El Sporting de Djukic camina a paso lento y tiene el traspié como costumbre. En un curso plagado de oscuridad, las mínimas luces que el duelo en Soria permitía observar en la lejanía, no suman suficientes argumentos para el optimismo. El tiempo juega en contra del técnico serbio y la clasificación aumenta la presión sobre una plantilla de rendimiento liliputiense.

Del progresa adecuadamente con que calificaba el entrenador a su equipo antes de viajar a tierras numantinas, al necesita mejorar, y mucho, de la vuelta a Mareo. Paso lento, borrón en los deberes y un nuevo tropiezo a la mochila, pesada. Si estudian matemáticas, suspenden lenguaje.

Mayor vocación ofensiva

El planteamiento de partida confirmaba el nuevo paradigma. La mirada puesta en el arco contrario. Si no hay goles que no sea por no buscar la portería. Insistentes los atacantes rojiblancos, que a base de ensayos tampoco lograron afinar la puntería. De las 19 intentonas que registran las estadísticas del choque, únicamente dos obligaron a intervenir al meta gijonés del Numancia. Sin contabilizar el gol anotado por Djuka, para un mano a mano que va dentro, y que fue anulado con la intervención del VAR. 

Los rojibancos se vieron incapaces de sacar rédito a los numerosos centros laterales y a la mayor presencia en terreno de juego rival, al que le discutieron la posesión del esférico hasta terminar el duelo con el 50% para cada conjunto. La falta de pegada es un lastre que la mano del nuevo técnico busca soltar aumentando el número de elementos en posiciones de remate. La mejoría en este apartado, insuficiente, queda diluida por los errores en área propia.

La losa del balón parado 

No es novedad. El juego en estático penaliza a los rojiblancos una jornada más. La línea defensiva 'rocosa' que pretende tener como base el entrenador serbio, se convierte en 'blandiblu' cuando debe afrontar un balón parado en contra.

Lastrados por los fallos de marcaje, los despistes y la incapacidad para hacerse fuertes en área propia, los rojiblancos tiemblan y hacen temblar en cada jugada de pizarra. Las dos derrotas del técnico serbio han seguido similar guión. Gol tempranero tras saque de estrategia. La sangría pudo ser doble en Los Pajaritos, pero el VAR actuó para evitar la sangría. Debilidad conocida, por propios y extraños. Fragilidad impropia de un conjunto con aspiraciones a algo que no sea sobrevivir con apuros.

Minutos para el 4-4-2

La búsqueda de soluciones con el duelo en marcha y el marcador adverso llevaba al técnico serbio a variar el dibujo y tratar de sumar hombres en área contraria. La entrada al terreno de juego de Álvaro Vázquez suponía un movimiento de piezas que trasladaba a Aitor García al costado derecho y desplazaba a Manu García a la banda izquierda.

La variante no traía los frutos esperados. La mínima participación del delantero catalán, desenganchado de la circulación y estático hasta la desesperación, más la posición de Manu, desacertado en gran parte del duelo pero desaparecido por completo junto a la cal, no mejoraba las opciones atacantes y multiplicaba los problemas en defensa. Unai, que había cumplido con creces de improvisado lateral zurdo, se veía superado sin las ayudas de su compañero de banda.

Los cambios

Unai Medina por Molinero. Modificación obligada por lesión y segunda jornada consecutiva que el vizcaíno debía ocupar una demarcación extraña para él. Cumplió con solvencia la papeleta en gran parte del duelo, aunque el paso de los minutos y la falta de apoyos de Manu García en el tramo final del partido hicieron que se viera superado por momentos.

Nacho por Pedro. El cambio en la medular y la permuta de canteranos aportó frescura, cabeza y pausa al encargado de construir ataques con mordiente. Nacho buscó socios para combinar, no siempre con acierto y trató de mantener el ritmo de llegadas en la recta final del duelo. La duda en el aire, ¿merecía el momento tomar más riesgos y suplir a Javi Fuego en vez de a Pedro?.

Álvaro por Carmona. Un cambio que traía triple consecuencia. Variable en el dibujo, para jugar con dos referencias ofensivas, el cambio de posición de un gris Manu García, que se encadenaba a la banda para desaparecer por completo y la confirmación de que Álvaro Vázquez no está. No hubo sombra alguna de delantero en su paseo por Los Pajaritos.

Nota a Djukic y el cuerpo técnico

Aprobado. Pero raspado. Después de tres jornadas al frente del equipo, la evolución en el juego, planteamiento y ejecución, no se ha asentado al ritmo necesario para mostrar una mejoría que permita elevar la esperanza en abandonar la zona baja de la tabla. Los cambios, cierto que un encuentro más el serbio se veía obligado a gastar una modificación por lesión, no lograron alterar el ritmo del partido, ni mejoraron en exceso lo que había sobre el terreno de juego.