Situación del nuevo futbolista rojiblanco
24 dic 2025 . Actualizado a las 00:51 h.La principal incógnita en el fichaje de Brian Oliván por el Real Sporting de Gijón giraba en torno a su estado físico. El lateral zurdo, sin equipo desde verano y sin competir desde el pasado mes de enero, ofrecía razonables dudas sobre su punto de forma. Sin embargo, su escasa participación en los últimos meses y su salida del Espanyol no fueron tanto una cuestión física sino por una cláusula de su contrato que le aseguraba la renovación en caso de alcanzar un número concreto de partidos disputados, lo que jugó en su contra.
En el entorno sportinguista sorprendió que a las primeras de cambio, con apenas un par de entrenamientos, Borja Jiménez decidiera incluirlo entre los convocados para el duelo ante el Leganés, llegando a calentar en la banda por si era necesaria su entrada al terreno de juego después de que Diego recibiera un golpe en la cabeza tras un duelo aéreo.
Finalmente, Oliván no se estrenó en Butarque, pero quedó patente que el futbolista está apto para competir si así lo requiere el cuerpo técnico. Obviamente le falta ritmo competitivo por esa prolongada ausencia de los terrenos de juego, algo que el propio Borja reconoció, pero por lo demás, su preparación física al momento de su llegada al Sporting es prácticamente inmejorable a criterio de los técnicos de Mareo.
Esto se debe, en parte, a que su falta de minutos en el Espanyol durante la segunda vuelta de la pasada temporada no responde específicamente a un tema físico. Oliván tuvo una dura competencia con Carlos Romero, el que hoy es una de las revelaciones de Primera División en el lateral izquierdo del conjunto perico, gran sorpresa positiva de la primera vuelta, ubicado en puestos europeos.
No fue hasta mediados del mes de octubre cuando Manolo González comenzó a agitar el árbol en busca de mejorar la dinámica de resultados, dando entrada de forma recurrente en sus alineaciones a Oliván. Una oportunidad que aprovechó para asentarse en la titularidad, circunstancia que le acompañó hasta que a finales de enero cayó lesionado en un duelo ante el Sevilla en el Sánchez-Pizjuán. El club barcelonés reportó en un comunicado médico una lesión en el isquiotibial de la pierna izquierda, quedando pendiente su retorno de cómo evolucionó su recuperación.
Una lesión muscular común, que apenas requiere de dos o tres semanas -en los grados más 'leves' de la lesión- para volver a estar disponible. Así fue, pues Oliván volvió a la convocatoria medio mes después de cara al duelo frente al Athletic. Aquel día no tuvo minutos, una circunstancia que se repitió ante Alavés, Girona o Mallorca, último partido en el que fue incluido en una convocatoria allá por el mes de marzo.
Entre la prensa y la afición perica llamó la atención esta situación, sin que el club comunicase ninguna novedad en forma de lesión o cuestión médica sobre el estado del futbolista, pero pasando a tener un rol totalmente secundario cuando venía de ser titular hasta ese traspiés de Sevilla. El motivo parecía evidenciarse: Oliván tenía una cláusula en su contrato que le garantizaba la ampliación automática por un año más si llegaba a disputar en 20 partidos esa temporada. El lateral sumaba 18 en el momento de su lesión. Por minutos, a priori se podría gestionar con cierto margen, jugando 45' o más tan solo en 13 duelos, pero la 'coincidencia' estaba ahí, y levantó suspicacias.
Oliván no volvió a ser convocado, sin problema físico o disciplinario reportado, reforzando la teoría de que se trataba de una mera cuestión contractual. El jugador continuó en dinámica de trabajo habitual, si bien no recibió propuesta de renovación por parte del Espanyol en ese tiempo y acabó finalizando su contrato en el club catalán, saliendo con la carta de libertad el 30 de junio. Mientras, los blanquiazules firmaron al jugador del Elche José Salinas, con el que llegaron a un acuerdo durante sus últimos meses de contrato, y dieron proyección a Carlos Romero para completar la posición con futbolistas más jóvenes, planificando antes de cerrar la temporada su futuro sin Oliván en la plantilla.