La guerra de las cervezas que mató a la Estrella de Asturias

F. Sotomonte

VIRAL

Los tribunales anulan definitivamente la posibilidad de que vuelva a reflotarse la marca reactivada en 2014

12 sep 2019 . Actualizado a las 11:42 h.

En el universo de las cervezas tienen su propia Star Wars, una lucha sin concesiones por los nombres y las marcas en la que el símbolo de la estrella es muy codiciado. Y finalmente para la asturiana, Damm ha sido la Estrella de la Muerte. Estrella de Asturias era (porque ya definitivamente no podrá seguir comercializándose así) una marca poco conocida y con escasa distribución y ahora termina después de que los trubunales hayan decido darle la puntilla.

Según relata El Confidencial, lo cierto es que Estrella de Asturias tuvo una vida breve e interrumpida y vivió un relanzamiento en el año 2014 cuando otra estrella, la de Madrid, decidió adquirla de forma estratégica para hacer frente a las demandas de otras dos gigantes de la galaxia cervezera: Estrella de Galicia y Estrella Damm. Fue aquel mismo año cuando Jorge Pinto lanzó Estrella Madrid y se topó con un aluvión de demandas que terminó en 2018 con la anulación de la marca por parte del Tribunal Supremo. En ese intervalo, Pinto reactivó Estrella de Asturias tras hacerse con la marca para consolidar sus argumentos en los pleitos, es decir, que había varias cervezas que compartían la denominación. Estrella de Galicia contraatacó indicando que la marca había caducado por falta de uso, ya que las marcas que no se utilizan durante cinco años pierden su registro; y aunque en principio su razonamiento fue tomado en consideración por un juez de lo mercantil de la capital, al final la sentencia fue corregida por la Audiencia Provincial de Madrid. 

Estrella de Asturias pudo resistir un tiempo más, pero la ofensiva definitiva llegó de la mano de Damm y desde Alicante, donde tiene su sede la Oficina Europea de Patentes. Además lo hizo con un argumento distinto al de los gallegos y no adujo que la marca ya no tuviera uso sino que podía crear confusión entre los consumidores. El pasado 28 de junio, la Audiencia de Alicante le dio la razón de forma definitiva a Damm.

Sigue en marcha, eso sí, la Estrella de Gijón. La marca data de 1893 pero vieron su fin en 1974, cuando la fábrica gijonesa echó el cierre, hasta este año. En febrero de 2017, después una serie de pleitos para conseguir recuperar la marca, la cerveza volvió a su ciudad con una cerveza rubia de 4.5%vol.

No es el único caso de bebidas asturianas que se dirimen en los tribunales. El año pasado, la Asociación Sidra Asturiana (ASSA) lanzó un recurso contra sentencia dictada por el juzgado de lo Mercantil número 1 de Santander que había desestimado la pretensión del colectivo de que un productor cántabro dejase de usar un modelo de botella (molde de hierro) igual al que se usa en Asturias.