Una reciente sentencia declara improcedente el cese de una mujer que ejercía como auxiliar de ayuda a domicilio para una empresa de Lugo y atribuye la responsabilidad de interesarse por su situación al empleador
Aunque la comunicación de la extinción del contrato se recibió en el domicilio del fallecido, los jueces consideran que se trata de una acción vinculada al trabajo